Cuando las poblaciones querían confeccionar su escudo de armas, unas lo hacían tomando las peculiaridades de su territorio, sus monumentos, producciones más características o hechos memorables que ocurrieron en la población o hazañas de sus pobladores. Otras, decidían tomar su escudo de armas de las privativas de sus señores, que por su destacada personalidad y por sus hechos eran recordados por la historia.
Este es el caso de Chinchón, que el día 15 de abril de 1648, por acuerdo del concejo, decide "Que en las casas de ayuntamiento y demás partes públicas, se pinten las armas de su excelencia, incorporando las de su Casa Saveli a las de Cabrera y Bobadilla, de la Casa de Chinchón".
Los escudos de los primeros condes de Chinchón, aparecen sobre las puertas del Castillo, sobre la puerta de entrada de la Iglesia del Convento de Santa Clara, en la entrada de la clausura de este mismo convento y en las cuatro pechinas de la iglesia del que fue convento de los Agustinos, actualmente aneja al Parador de Turismo. Estas son las armas de los Cabrera y Bobadilla:
"Por autorización real, el primer señor de Chinchón, forma su escudo de armas con los blasones de la cabra en campo de sable, que eran las armas de su apellido, agrega el castillo y el león, con los colores reales en los cuarteles superiores, uniéndose a éstas las cuarteladas de águilas y castillos de Bobadilla, el apellido de su esposa; con escudete sobre el todo de dos calderos, con la bordura de castillos y leones".
El 25 de octubre de 1738 compra el condado de Chinchón el infante don Felipe de Borbón, hijo de Felipe V, quien el 17 de febrero, firma en el Pardo la Real Carta en la que concede a Chinchón el título de "Muy Noble y Muy Leal"
A partir de entonces, se agrega esta leyenda al blasón de Chinchón, y queda así constituido:
Escudo cuartelado. 1º Cabeza de cabra contornada en azur; 2º De gules, castillo de oro rodeado de ocho estrellas del mismo metal; 3º León de oro, rampante, sobre gules, y 4º Lis de oro sobre azur.
En el año 1924, el Ayuntamiento de Chinchón, solicita a la Real Academia de la Historia un dictamen para adoptar definitivamente el escudo de armas que corresponde a la Ciudad de Chinchón. Como contestación, responde: “Desde luego puede afirmarse que la ciudad de Chinchón carece de escudo propio y ha venido usando, desde hace mucho tiempo, uno que más o menos arbitrariamente recuerda el de sus antiguos señores y titulados los Condes de Chinchón, tal hecho constituye una positiva tradición , entiende la Real Academia de la Historia que debe conservarse si bien haciendo las oportunas modificaciones que recuerden los señoríos de que fue objeto la ciudad y de los que de ella se titularon condes y en tal sentido, propone que el escudo de sus armas debe ser cuartelado en las siguiente forma:
"Primer cuartel medio partido y cortado, en el primero de los tres cuarteles resultantes un campo de gules, castillo de oro almenado, en el segundo, en campo de plata, león de gules rampante, y el tercero en campo de sable cabra de oro levantada. Segundo cuartel, cuartel lado primero y cuarto, águila de sable en campo de oro, segundo y tercero Castillo al natural en campo de plata, orlado de castillos y leones. Tercer cuartel, flor de lis de oro y campo de azur; y cuarto cuartel, jaquelado de sable y oro, el todo armado y coronado con corona de Conde".
Los escudos de los primeros condes de Chinchón, aparecen sobre las puertas del Castillo, sobre la puerta de entrada de la Iglesia del Convento de Santa Clara, en la entrada de la clausura de este mismo convento y en las cuatro pechinas de la iglesia del que fue convento de los Agustinos, actualmente aneja al Parador de Turismo. Estas son las armas de los Cabrera y Bobadilla:
"Por autorización real, el primer señor de Chinchón, forma su escudo de armas con los blasones de la cabra en campo de sable, que eran las armas de su apellido, agrega el castillo y el león, con los colores reales en los cuarteles superiores, uniéndose a éstas las cuarteladas de águilas y castillos de Bobadilla, el apellido de su esposa; con escudete sobre el todo de dos calderos, con la bordura de castillos y leones".
El 25 de octubre de 1738 compra el condado de Chinchón el infante don Felipe de Borbón, hijo de Felipe V, quien el 17 de febrero, firma en el Pardo la Real Carta en la que concede a Chinchón el título de "Muy Noble y Muy Leal"
A partir de entonces, se agrega esta leyenda al blasón de Chinchón, y queda así constituido:
Escudo cuartelado. 1º Cabeza de cabra contornada en azur; 2º De gules, castillo de oro rodeado de ocho estrellas del mismo metal; 3º León de oro, rampante, sobre gules, y 4º Lis de oro sobre azur.
En el año 1924, el Ayuntamiento de Chinchón, solicita a la Real Academia de la Historia un dictamen para adoptar definitivamente el escudo de armas que corresponde a la Ciudad de Chinchón. Como contestación, responde: “Desde luego puede afirmarse que la ciudad de Chinchón carece de escudo propio y ha venido usando, desde hace mucho tiempo, uno que más o menos arbitrariamente recuerda el de sus antiguos señores y titulados los Condes de Chinchón, tal hecho constituye una positiva tradición , entiende la Real Academia de la Historia que debe conservarse si bien haciendo las oportunas modificaciones que recuerden los señoríos de que fue objeto la ciudad y de los que de ella se titularon condes y en tal sentido, propone que el escudo de sus armas debe ser cuartelado en las siguiente forma:
"Primer cuartel medio partido y cortado, en el primero de los tres cuarteles resultantes un campo de gules, castillo de oro almenado, en el segundo, en campo de plata, león de gules rampante, y el tercero en campo de sable cabra de oro levantada. Segundo cuartel, cuartel lado primero y cuarto, águila de sable en campo de oro, segundo y tercero Castillo al natural en campo de plata, orlado de castillos y leones. Tercer cuartel, flor de lis de oro y campo de azur; y cuarto cuartel, jaquelado de sable y oro, el todo armado y coronado con corona de Conde".