Hoy hace cinco años que el Eremita saltó a la “blogosfera”. Un lustro acudiendo puntualmente a la cita que se obligó con todos vosotros. Un lustro tratando de ilustrar la historia de nuestro pueblo, de dar información de lo referente a la cultura, al arte y también a la actualidad del día a día.
En estos sesenta meses ha publicado más de 1740 páginas, lo que representaría un libro demasiado voluminoso, si se hubiese publicado en papel.
Y en estos sesenta meses, que es un plazo adecuado para amortizar una deuda, ha intentado saldar un compromiso de gratitud que hizo con su pueblo y con su historia, en el que se auto hipotecó y que después de este larguísimo plazo, ahora ya considera suficientemente saldado.
En estos 1825 días ha querido estar atento a lo que ha considerado importante en la vida social, política, económica, literaria y artística desde Chinchón, para hacerla llegar a todos los nómadas que han querido pasar por el desierto donde el Eremita quiso ubicar su eremitorio.
Son 43.800 horas de atención y dedicación permanente para no faltar a la cita, de llenar de fotografías, de relatos, de opinión, de arte, de música, de literatura, de historia y de actualidad, esas páginas que se han ido desgranando con la esperanza de tener al otro lado del universo virtual alguien a quien le pudiera interesar.
Son más de 2.500.000 minutos, más de 150 millones de segundos empleados para exponer una dedicación y un entretenimiento con los resultados de una obra fecunda, que intentaba demostrar cómo puede hacerse algo útil e interesante, que ha captado la atención no solo de los cercanos a Chinchón, sino también a infinidad de visitantes que han llegado hasta el Eremita en más de 250.000 visitas.
En nombre de el Eremita, muchas gracias a todos vosotros, y hasta siempre.