Es un enigma el nombre de Chinchón
que el tiempo se ha encargado de ocultar;
y aunque muchos lo buscaron con afán,
ninguno, hasta ahora, lo descifró.
Ramón Linacero aseguró,
que pareciendo un circo este lugar,
los romanos le llegaron a llamar
“Circum”, y de ahí, “Cincho” o “Cinchón”.
Aunque hay quien defiende la opinión,
que del árabe puede provenir,
oídas las diferentes versiones,
pienso que cualquier historiador,
no tiene más remedio que admitir,
de Ramón Linacero, las razones.