- Doña Esperanza y don Mariano andan de cambalache. Pero también don Arturo y los de la CUP. Y es que eso del cambalache está de moda en estos días, cuando todo se puede comprar o vender.Resulta que eso de confeccionar las listas electorales en los partidos políticos viene a ser como un mercado persa en el que se ponen a la venta favores, recompensas, agradecimientos, chantajes y vergüenzas varias, con el fin de acallar bocas, llenar estómagos, tapar escándalos, cerrar los ojos y taparse las narices para no tener que oler toda la podredumbre que se cuece en las cocinas y en los pudrideros de los partidos.También eso de elegir un presidente autonómico tiene un parecido razonable con lo anterior. En ambos casos, lo de menos es el bien común, la elección de los mejores o la búsqueda de la excelencia.Parece ser que don Mariano le ha colado dos ministros a la señora Aguirre y, a cambio, ella ha puesto a tres recomendados suyos en las listas por Madrid, para las próximas elecciones navideñas, por si no llegan a tiempo los regalos de Papa Noel.Después del espectáculo que nos están dando estos días desde el Parlamento de Cataluña y desde el partido en el gobierno, solo nos queda preguntarnos quienes son aquí los "anti sistemas".
Con el recuerdo de aquel amanecer de hace apenas treinta y un año de nada, mi felicitación y mi cariño. Muchas felicidades.
Nota.: Amanecer es otra forma de nombrar el alba.
