Luis Navarro García

Escucha el artículo.

Tiempo de lectura 9 minutos

Chinchón,(Madrid),  España, 15 de agosto del 2023

La Villa madrileña de Chinchón es mucho más que «Anís, plaza y mesón», y de eso, la persona de D. Manuel Carrasco nos va a hablar en el día de hoy.

Cada rincón de este coqueto, humilde y a la vez señorial pueblo está lleno de historias, las cuales durante años nos ha ido desenmarañando en su más que ardua labor de investigación, y posteriormente plasmándonoslas en sus innumerables artículos y libros (más de 4000 artículos y cerca de dos millones de visitas a su blog).

Hablar de la historia de Chinchón es hablar del genial pintor Francisco de Goya, y si nos remontamos tres siglos más atrás, estaríamos hablando de los Marqueses de Moya (Andrés Cabrera y Beatriz de Bobadilla) nombrados por los Reyes Católicos en 1480 Señores de Chinchón.

Para hablar del primer Conde de Chinchón tendríamos que irnos al año 1520 donde Carlos I le concedió dicho título a Fernando de Cabrera y Bobadilla el 9 de mayo de 1520, en La Coruña. Por aquel entonces D. Fernando de Cabrera y Bobadilla era Comendador en la Orden de Santiago y Alcaide del Alcázar de Segovia en una época muy difícil, precisamente cuando acababa de iniciarse la guerra de las Comunidades de Castilla.

Chinchón está muy estrechamente vinculado a Perú, y de eso nos va a hablar D. Manuel Carrasco en este artículo.

Sin más dilación damos paso a la entrevista.

1) ¿Un escritor nace o se hace?

Pues no lo sé. Posiblemente las dos cosas. Yo, de pequeño, escribía cuentos pequeñitos, que mi madre leía a las vecinas; aunque en la realidad, se parecían demasiado a “Pulgarcito”, “Blancanieves” y “El gato con botas”. Después, ya de mayor, cuando me prejubilé, participé en un taller literario y eso me ayudó a hacerlo mejor. Lo que es indudable es que cuanto más escribes, mejor lo haces. Es cuestión de entrenamiento. Hay que vencer el miedo al folio o a la pantalla en blanco del ordenador.

2) Coméntenos algunas de las satisfacciones y anécdotas que le ha producido hasta el día de hoy escribir sus innumerables artículos.

El escritor, creo, escribe para él, y la primera satisfacción es que le guste lo que acaba de escribir; después cuando lo publicas y recibes la respuesta de los lectores, eso es el mejor pago que puedes recibir. Claro está que estoy hablando como un escritor no profesional, que no tiene que vivir de ello. Me figuro que para los profesionales será más importante recibir el cheque o la transferencia a final de mes.

Vivo en un pueblo y aquí nos conocemos todos, y muchos leen mi blog, y es gratificante cruzarte por la calle con alguien que te dice que le ha gustado lo que has escrito.

También suelo recibir correos de personas que se identifican con mis escritos y mis investigaciones; como en un reportaje que hice del pintor Sarralde que estuvo en Chinchón durante la guerra Civil (1936-1939) y que me contestó su hijo desde México, con el que sigo manteniendo correspondencia todavía.

3) Ha recibido Vd. varios premios de investigación, así como ha quedado finalista en concursos de índole nacional.

Háblenos sobre ello y si tiene algún proyecto o evento a la vista.

Si, me han premiado varios trabajos de investigación sobre Chinchón, como “Piedras con Historia” que habla de los monumentos de Chinchón; “El descubrimiento de la Quina”, “Colonización y repoblación del territorio de Chinchón” y “Los franceses en Chinchón” que habla del ataque a Chinchón de las tropas de Napoleón en la guerra de la Independencia de 1808.

También me han premiado varios relatos en un Concurso convocado por Radio Nacional de España, habiendo sido finalista en cuatro ocasiones y recibido dos accésits. Ahora, ya estoy más mayor y solo tengo el proyecto de continuar con mi blog de “El Eremita”, por ahora.

4) ¿Cómo recuerda la publicación de su primer libro (La Mojona), fue más una apuesta personal por satisfacer su curiosidad y ampliar conocimiento o surge ya una inquietud por investigar y dicho sea de paso documentar sobre ello y dejar a largo plazo una obra que represente un legado para todos donde poder consultar la historia de Chinchón?

Cuando tenía 55 años, mi empresa, una Caja de Ahorros, me prejubiló. Yo pensaba que todavía tenía capacidad para hacer cosas importantes y en vez de ponerme a estudiar una carrera universitaria, me pareció más gratificante dedicarme a mis hobbies, como la pintura y la literatura, además de investigar la historia de mi pueblo, que era lo que tenía más a mano.

Como primer trabajo escogí la historia de la Sociedad de Cosecheros de Vino, Vinagre y Aguardiente de Chinchón, conocida como “La Mojona”, que era el nombre que entonces tenía el impuesto por medida de los líquidos. Una sociedad creada a mediados del siglo XIX, que reunía a los principales terratenientes del pueblo y que se adelantaron a su tiempo, creando infraestructuras y colaborando en la vida social, económica y cultural de Chinchón. Entonces comprendí que era muy importante descubrir la historia de nuestro pueblo. A raíz de la presentación de este libro, el Ayuntamiento de Chinchón convocó un concurso de investigación sobre Chinchón y su entorno, que se viene celebrando desde el año 2005 hasta la fecha.

5) Es muy posible que lejos de Chinchón no se sepa el nexo de unión que tiene esta Villa medieval madrileña con Perú, salvo en el mismo Perú. Coméntele a los lectores sobre ello y sobre su libro «Descubrimiento de la Quina».

Del año 1629 al 1640, nombrado por el Rey Felipe IV, fue Virrey del Perú Don Luis Jerónimo Fernández de Cabrera y Bobadilla, IV Conde de Chinchón; era su segunda esposa, doña Francisca Enríquez de Rivera, conocida como la Virreina del Perú, a quien se le atribuye el descubrimiento de la quina, como remedio para el paludismo; en cuyo honor y recuerdo, en el año 1742, el famoso naturalista Carl Von Linnè o Linneo, en su obra “Genera Plantarum” bautizó con el nombre de “Cinchona” o “Chinchona” al árbol de la quina, como homenaje a la intervención de la Condesa de Chinchón en su descubrimiento.

En mi trabajo de investigación, se intenta clarificar lo que hay de histórico y de leyenda en la participación de la Condesa de Chinchón, en este descubrimiento, fundamental para la curación del paludismo.

6) ¿Cómo surge su alias «El Eremita»?

Dicen que siempre los personajes de los relatos se parecen un poco a los autores, que de alguna forma en nuestros escritos vamos haciendo nuestra propia biografía. Hace mucho escribí un relato que titulé “Simón el eremita” y resulta que el personaje tenía un cierto aire con mi forma de ser y de pensar, y me gustó su seudónimo; tanto que cuando decidí publicar un blog adopte el título de El Eremita.

El eremita era el que se retiraba al desierto (del latín eremus) a pensar y vivir en solitario. Así que me retiré a mi desierto en Chinchón, para recibir en mi blog a todos los nómadas del mundo.

7) Se ha atrevido al margen de publicar innumerables artículos y libros sobre la historia de Chinchón con un libro de recetas de cocina. Es Vd. una caja de sorpresas señor Carrasco. ¿Cómo se le ocurre escribir sobre cocina?

Yo de cocina no sé mucho. La idea surgió con una amiga, que ella sí es buena cocinera, que había ido recopilando las recetas familiares, de la cocina tradicional que se hacía en Chinchón. Aquí, como en casi todos los pueblos se hacía una cocina ligada a los productos de temporada e influenciada por las fiestas y celebraciones anuales. Así, intentamos unir las costumbres y celebraciones con la tradición culinaria. Yo escribí los textos y ella, las recetas. El libro tuvo una gran acogida; tanto que el Parador de Turismo de Chinchón organizó unas jornadas gastronómicas basadas en las recetas del libro. Se publicó en el año 2008 en una edición de 250 ejemplares numerados, y se agotaron en poco más de un mes.

8) ¿Dónde pueden los lectores de Unidad Parlamentaria ampliar información sobre Vd. y la historia de Chinchón, y cómo pueden acceder de alguna manera a su obra?

En mi blog. En mayo del año 2008 se inició el Eremita. Son ya 15 años, con más de 4000 publicaciones, y cerca de 1.900.000 visitas de todo el mundo. Concretamente en México tengo muchos seguidores que han visitado mis publicaciones en cerca de 45.000 ocasiones.

Ahí pueden encontrar casi todo lo que he escrito, relatos, novelas, poesía, viajes, historia, y casi todo lo que he aprendido de Chinchón, mi Pueblo; que si vienen por España no deben dejar de visitar.

Este es el enlace a mi blog:

http://manolo-eleremita.blogspot.com/

El Eremita:

No es un blog de historia.

No es un blog literario.

No es un blog de noticias.

No es un blog de cotilleo.

No es un blog de arte.

No es un blog de opinión.

Es, solamente, el entretenimiento de un ocioso, que prefiere perder algo de «su» tiempo en estos menesteres, en vez de dedicarse a jugar al mus, al tute o al chinchón. Sin embargo, es un blog en el que se habla de muchas cosas. Que tiene muchos datos históricos, de literatura, de arte…

Incluso, de Chinchón.

Un blog que da noticias.

Un blog en el que, a veces, se opina.

Un blog que se puede leer mientras tomas un café o una copita de chinchón.

Es el blog de un «eremita» de vocación que ha encontrado «su» desierto en Chinchón, porque el Sahara queda algo lejos y además, dicen, allí hace mucho calor…

Es el blog de Manolo.

9) Quiere añadir algo más?

Parafraseando al Evangelio de San Juan (21:25)

“Y hay también otras muchas cosas que hizo Manolo El Eremita, que si se escribiesen cada una por sí, pienso que ni aun el mundo podrá contener los libros que se habrían de escribir…”

Es broma, claro.

Una reseña breve y anecdótica sobre Chinchón para acabar por hoy:

Los restos más antiguos hallados en su entorno corresponden al Neolítico, y también conserva restos de un poblado celtíbero al que siguieron los romanos, los visigodos, musulmanes y cristianos.

Se sabe que el lugar estuvo en manos de los romanos (en la antigua Carpetania) y los árabes, según demuestran los restos hallados.

La Plaza Mayor, de gran interés y de arquitectura popular, típica de la Edad Media. Una gran parte de sus edificios tienen soportales y balcones de madera propios del siglo XV.

Como veis Chinchón es algo más que «Anís, plaza y mesón».

PUBLICADO POR

Unidad Parlamentaria