Hoy, último día de agosto, se dan por concluidas oficialmente las fiestas de San Roque y de la Virgen de Gracia. A partir de mañana dejaremos de oír repicar la pequeña campana de la ermita del Santo a la caída de la tarde; y hoy puede ser buena fecha para hacernos la pregunta que encabeza esta entrada del blog.
Como suele ser habitual en los días posteriores a las fiestas, los que no se han marchado de vacaciones, se han entretenido en comentar en los mentideros de los soportales los aciertos y fallos de las fiestas. Y como es natural, ha habido opiniones para todos los gustos, como no podía se de otra manera.
También, desde la página Web del Ayuntamiento, la Alcaldesa y la Corporación Municipal han agradecido a todo el pueblo de Chinchón y a todos los nos han visitado en estos días de fiesta, el buen comportamiento demostrado durante el transcurso de las Fiestas Patronales y se han comprometido a subsanar los posibles errores que se hayan cometido.
¿Las fiestas han estado bien o mal? Aparte de los gustos particulares de cada uno, para poder dar una opinión más o menos objetiva se necesitaría más información, pues es muy difícil opinar si no tienes toda la información, y faltan muchos datos económicos de las fiestas de San Roque. El Ayuntamiento ha procurado hacer unas fiestas reduciendo al máximo los gastos, lo que necesariamente tiene que repercutir en una pérdida de calidad. ¿Se ha conseguido optimizar el dinero invertido?
Lo mismo que se ha utilizado la página web para el agradecimiento, también se podría utilizar para dar información precisa sobre gastos e ingresos de las fiestas, y con estos datos podríamos opinar y ofrecer a nuestros gobernantes las sugerencias pertinentes para mejorarlas en lo sucesivo, como ellos se comprometen en la web del Ayuntamiento.
Hubo tiempos en los que se publicaban en la página Web los datos detallados de las fiestas. Cuando tanto se defienden las tradiciones y costumbres antiguas, no estaría de más que se siguiese esa buena costumbre de informar.
Y sólo un pequeño apunte: En la cesión gratuita de los espacios públicos para la celebración de espectáculos en los que se va a cobrar la entrada, habría que meditar y sopesar la calidad de dicho espectáculo antes de tomar esa decisión, pensando además que al cerrar esos espacios públicos se puede perjudicar a personas y negocios que pagan sus impuestos. El rellenar un espacio en el programa de festejos no es, a mi juicio, motivo suficiente para dar “facilidades” a quienes no garanticen un estándar aceptable de calidad en lo que se va a realizar.
Informar no cuesta dinero y evita que circulen bulos y malentendidos que no benefician a nadie, y menos a Chinchón.