Me decía un amigo que en Chinchón debíamos estar muy agradecidos a la Comunidad de Madrid, regida por el Partido Popular, por todas las obras que se habían realizado en los últimos años en nuestro pueblo. Hace unos días leí en una entrada de Facebook que era conveniente que nuestras autoridades locales estuvieran "cerca" de las autonómicas para así conseguir mayores prebendas, sugiriendo que los que no tuviesen "padrinos" políticos lo tendrían difícil para "bautizarse".
¿Pero que pasa? ¿Es que tenemos ya tan asumida la corrupción que pensamos que solo se actúa por intereses bastardos?
En primer lugar, las obras realizadas en Chinchón subvencionadas por la Comunidad de Madrid, lo fueron con dinero de los impuestos de todos los madrileños. En segundo lugar estas obras se realizaron, me figuro, dentro de un plan previamente previsto de ayuda a los municipios y de acuerdo con unos criterios de urgencia, necesidad y de oportunidad. Por lo tanto, solo habrá que felicitarse porque nuestras autoridades autonómicas hayan cumplido con la función para la que fueron elegidos.
¿O es que alguien piensa que esa obras fueron adjudicadas a Chinchón sin corresponderle y solo por "enchufe" y amiguismo?
¿Alguien está acusando a las autoridades comunitarias de Madrid de prevaricación?
De prevaricación, no. Pero hay quiénes, con un afán desmedido y laudatorio hacia los suyos, llegan a "sugerir" comportamientos que se acercan demasiado al delito.
Pero lo hacen sin darse cuenta y quizá porque nos hemos acostumbrado a ver como normal lo que solo es corrupción.