Este dibujo se lo dedicó a Gonzalo Jimenez su amigo Pablo Roldán
LA FAROLA DE CHINCHON.
Nunca olvido, Chinchón, aquellos años
que estando la farola en nuestra plaza
veía desfilar toda una raza
de hombres fuertes, sobrados de reaños.
Recordar esos tiempos no es extraño,
y es extraño tampoco si algún viejo
cuenta quen en la farola, Luis “Conejo”
encelaba al toro con engaño.
Ahora que tenemos a diario
encalvada al pie del Alamillo
en este de su vida un centenario
escribo este soneto tan sencillo
teniendo como un fondo de escenario
la mole abandonada del castillo.
Ilustración: "Plaza con farola" de Manolo Carrasco, con la dedicatoria especial a un amigo, lector y asesor en mis publicaciones, que hoy se hace un poco más mayor.