SEGUNDA ENTREGA.
o la segunda entrega de la
tragicomedia deEdgardo Jose y Matilde,
en la que se narran las desventuras
que hubieron de vivir nuestros protagonistas,
cuando los efectos del amor
abandonaron sus vidas y
estimaron que era el tiempo de
volver a intentar la felicidad
cambiando de pareja.
Asimismo se reseña cómo la estupidez
de las gentes perdura en el tiempo
sin importar que hayamos
llegado al siglo XXI.
Nota del autor:
Los personajes principales de esta historia son los mismos que los de la primera parte, por lo tanto, reitero: cualquier parecido con la realidad no es mera coincidencia, porque el argumento de la Boda II está tomado de la más pura realidad, aunque tambien he procurado desfigurarlos un poco y camuflarlos para que sea dificil reconocerlos, por lo que si alguno cree verse representado y no se gusta, porque es demasiado gordo y poco agraciado, quiero recordarles lo del espejo y lo de la báscula que decía al principio de la primera entrega. Como novedad, aparecen varios personajes cuyos nombres son reales pero que no tienen una participación directa en la acción y no es más que un guiño cariñoso como muestra de mi aprecio a esas personas.
Indice:
PREFACIO.
Capítulo I : Los mejores años de nuestra vida.
Capitulo II : Coincidencias...sospechosas.
capítulo III : Lo primero es antes.
capitulo IV : Sin remedio.
capitulo V : Habla con mi abogada.
capitulo VI : Los hijos ¿son bienes gananciales?
capitulo VII : Tengo que rehacer mi vida.
capitulo VIII: Solo se vive una vez.
capitulo IX : Cualquier tiempo pasado fue mejor.
capitulo X : Volver a empezar.
EPILOGO.
Prefacio:
Se ha dicho siempre que "nunca segundas partes fueron buenas" y no sé qué pasa que cuando a alguien se le ocurre una tontuna* y lo repite mucho, termina siendo aceptado por la mayoría que, generalmente, no se para mucho a pensar las cosas y eso sí que, verdaderamente, es una tontuna*.
Menos mal que Miguel...¿Boyer? no, hombre,...Cervantes... Miguel de Cervantes... Digo que menos mal que Miguel y yo no hicimos caso a este aserto y ahí está la segunda parte de Don Quijote de la Mancha y aquí la segunda parte de La Boda, que he titulado La Boda II a lo que he añadido el subtítulo de El desenlace; ya saben... por hacer un juego de palabras... Si la boda es un enlace... el desenlace......¿me entiendes...?
La primera entrega de La Boda transcurre en los año 1996/97 y en ella se recogen hechos y personajes reales que eran actualidad en aquellos años. Esta segunda se escribe en el año 2001, cuando sólo han pasado cinco años, pero me he permitido la licencia de tomar a los mismos personajes y trasladarlos veinte años después, por lo que la acción debería ser, realmente, en el año 2016. Esta no es una novela de ciencia-ficción y por lo tanto no me he preocupado de inventar un entorno previsible para la acción y aunque he procurado no hacer mención a hechos concretos, es posible que algún lector conspicuo pueda encontrar algún anacronismo en este relato.
En la primera entrega se narran acontecimientos, deliberadamente caricaturizados, que se podían repetir en muchas de las bodas que por aquellas fechas se celebraban; en esta segunda entrega se habla de sentimientos y circunstancias que pueden ser comunes en algunos casos, pero que, de ninguna manera, se pueden considerar como denominador común ni de las causas, ni del desarrollo, ni mucho menos del desenlace de de este tipo de acontecimientos.
Por otra parte, aunque he pretendido mantener un cierto sentido del humor, creo que se me ha podido escapar el tono agridulce que siempre produce el fracaso de cualquier proyecto y más si en él intervienen los sentimientos de las personas.
Espero que os guste el desenlace que he pensado para El desenlace.
*Tontuna.- En mi pueblo equivale casi a tontería. Pensarán que debía haber puesto directamente en el texto la palabra tontería y así evitarme todo esto, pero es que hay un pequeño matiz: tontuna es una tontería como más pequeña, con un cierto grado de ingenuidad y como más cariñosa. O sea, que si cuando termineis de leer la novela no os gusta podreis decirme que es una tontuna y no me sentará mal... lo que nunca os perdonaría es que me dijéseis que era una tontería.