Bien es verdad que no todos; siempre hay excepciones, pero la mayoría de los futbolistas son muy feos, sobre todo cuando empiezan a jugar al fútbol. Luego van cambiando, sobre todo los que se hacen famosos, y es que el dinero y los asesores llegan a hacer verdaderos milagros.
Solo hay que fijarse en las fotos de los futbolistas, famosos y millonarios, cuando eran más jóvenes: todos bastante feos, y la mayoría con cara de brutos; luego, ya digo, se van puliendo y llegan a ser resultones. Fijaos, por ejemplo en Raul, o en Sergio Ramos de jóvenes, sus caras eran más bien de las del montón, luego al lado de Mamen y de Pilar Rubio, ya parecen otros, y es que yo creo que, al contrario de lo que se dice, en algunos casos también se pega la hermosura; sobre todo a los futbolistas si llegan a millonarios.
Claro que, como también decía, hay sus excepciones. David Beckham, Ronaldo y muy pocos más son los que se salen de la generalidad. Porque Messi, Suárez, Neymar, Bale, Benzema, Modric y, no digamos, Puyol, son bastante, pero bastante, feos.
Claro que como buenos jugadores si lo son, además muy ricos (en dinero quiero decir) y como después se acompañan de esos bellezones (ahora las dicen "wags"), casi nadie se fija en sus caras y casi nadie se ha dado cuenta de que la mayoría de los futbolistas son, realmente, muy feos.