DOÑA FRANCISCA ENRIQUEZ DE RIVERA. CONDESA DE CHINCHON
En el mes de enero de 1949 varias personas particulares de Chinchón envían un escrito al Ayuntamiento para que se organice un acto de homenaje a la Condesa de Chinchón y Virreina del Perú doña Francisca Enríquez de Rivera, esposa del IV conde de Chinchón, don Luis Jerónimo Fernández de Cabrera.
Con fecha 21 de febrero de 1949, el Ayuntamiento nombra una comisión para que se encargue de realizar este acto, siendo nombrados los siguientes señores:Presidente: Narciso del Nero Carretero. Vocales: Enrique Pelayo, Marcial Fernández-Sancho, Juan José Recas, Alfredo Rodríguez y asesor económico don Pablo Rodríguez Quiza, Interventor del Ayuntamiento.
Se nombró también un Comité de Honor, formado por las siguientes personalidades:D. Javier Martín Artajo, don Emiliano Montero Ruiz, don Abrahán Quintanilla Rojas, don Julián Larroca, don José Sanchiz, Marques de Pescara, don Enrique de la Vara, don José María Pemán, El Conde y la Condesa de Chinchón, don Felipe Sassone, don Raúl Porras Barrenechea y don Alberto Martín Artajo, Ministro de Asuntos Exteriores.
Los organizadores se plantean la posibilidad de solicitar la construcción de un grupo escolar en honor de la Virreina, así como un parque infantil con una estatua o monumento a la Virreina que estaría ubicado en los huertos de la calle del Generalísimo.
Otro de los objetivos era poder traer los restos de la condesa desde Cartagena de Indias a la Iglesia de la Asunción de Chinchón.
El día 16 de marzo de 1950, se hicieron visitas al Ministro de Asuntos Exteriores y a la Condesa de Chinchón doña María Belén Morenés y Arteaga, para entregarles el nombramiento de miembros del Comité de Honor, recibiendo su aliento, pero no se llegó a hacer nada. (Estos datos están tomados de la revista nº 4 de “Vida” de abril de 1950, en sendos artículos firmados por Mateo de las Heras y Narciso del Nero.
Muchos años después, el 15 de marzo de 1997 la Agrupación de Amigos de Chinchón instaló un busto de la Virreina en la Plaza de Palacio, asistiendo al acto el Conde de Chinchón y el embajador de Perú en España.
En próximas entradas, iré ampliando la información sobre la Virreina del Perú y su itervención en el descubrimiento de la quina.
Los organizadores se plantean la posibilidad de solicitar la construcción de un grupo escolar en honor de la Virreina, así como un parque infantil con una estatua o monumento a la Virreina que estaría ubicado en los huertos de la calle del Generalísimo.
Otro de los objetivos era poder traer los restos de la condesa desde Cartagena de Indias a la Iglesia de la Asunción de Chinchón.
El día 16 de marzo de 1950, se hicieron visitas al Ministro de Asuntos Exteriores y a la Condesa de Chinchón doña María Belén Morenés y Arteaga, para entregarles el nombramiento de miembros del Comité de Honor, recibiendo su aliento, pero no se llegó a hacer nada. (Estos datos están tomados de la revista nº 4 de “Vida” de abril de 1950, en sendos artículos firmados por Mateo de las Heras y Narciso del Nero.
Muchos años después, el 15 de marzo de 1997 la Agrupación de Amigos de Chinchón instaló un busto de la Virreina en la Plaza de Palacio, asistiendo al acto el Conde de Chinchón y el embajador de Perú en España.
En próximas entradas, iré ampliando la información sobre la Virreina del Perú y su itervención en el descubrimiento de la quina.