Anda circulando por ahí una encuesta para poner nombre a un coche de la marca SEAT. Se puede escoger entre los nombres de los "pueblos más bonitos de España" entre los que se encuentra el nuestro.
No creo que decidan bautizar "CHINCHÓN" al nuevo coche, pero en ese caso habría que ir pensando cuánto pedir por autorizarlo.
Y es que la marca "CHINCHÓN" ha conseguido con el paso de los siglos una cierta popularidad y un cierto renombre. Desde la "chinchona" de Linneo, la "copita de chinchón", el vino y el aceito, los ajos finos, los mesones y restaurante, la plaza y el cine, "CHINCHÓN" como marca se ha ido imponiendo y hoy en día representa una seña perfectamente identificable y de prestigio.
El nombre de Chinchón suele ir unido a la historia, al arte, a la cultura y a la tradición; sus fiestas, sus celebraciones y sus convocatorias, cada día más, son un reclamo que atrae a más visitantes; la televisión y los medios de comunicación son los altavoces que lanzan el nombre y la marca CHINCHÓN al mercado con la consiguiente repercusión en todos los aspectos de nuestra vida.
Es deber de todos mantener ese prestigio de CHINCHÓN como marca y cuidar que nuestra historia actual sea digno reflejo de la antigua, que el arte que tantos artistas fueron dejando durante la historia siga siendo un atractivo más en las convocatorias de nuestro pueblo; que la oferta cultural sea uno de los motivos para que nos sigan visitando; que la calidad y la acogida sean las señas de identidad para nuestros establecimientos turísticos, y que la proverbial amabilidad de los chinchonenses siga siendo comentada por todos los que llegan a visitarnos.
La Casa de la Cadena puede ser el emblema cultural que nos ayude a conseguir este objetivo.
Entre todos tenemos la obligación de cuidar nuestra marca: "CHINCHÓN".
