Siguiendo con nuestras visitas a los alrededores de Chinchón, hoy llegamos a Aranjuez. Es uno de los Reales Sitios de la monarquía española desde que Felipe II así lo nombrara en 1560, aunque posee además el título de villa desde 1899. Es por ello que también es conocido como Real Sitio y Villa de Aranjuez.
Es famoso por su Palacio Real y sus Jardines, por sus huertas de fresas y espárragos, por haber servido de inspiración al compositor Joaquín Rodrigo para su Concierto de Aranjuez.
Tambien es conocido por el llamado Motín de Aranjuez, que tuvo lugar en dicha localidad en 1808, y que terminó con la abdicación de Carlos IV en favor de su hijo Fernando VII.
El Paisaje Cultural de Aranjuez fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2001.
Dista de Chinchón unos veinte kilómetros, y desde que Felipe V compró para su hijo el Condado de Chinchón, las dos poblaciones han tenido frecuentes contactos, aunque no todos satisfactorios. Cuentan que por orden del Conde de Chinchón, se utilizaron las piedras del solado de la Iglesia de Chinchón para enlosar uno de los patios del Palacio de Aranjuez. La familia real no autorizaba a los nobles a establecerse en los reales sitios, por lo que muchos nobles abrieron casa en Chinchón y Ocaña para estar cerca de la realeza.
Desde Aranjuez hizo una vista a Chinchón la Infanta Isabel de Borbón, conocida como “La Chata”, y desde Aranjuez, donde estaba acantonado, partió el ejército francés para asolar Chinchón en los días finales de 1808.
Para terminar este paseo por Aranjuez, y como a mí me gusta dar siempre un toque artístico, dejar un recuerdo al pintor Rusiñol, que está unido a la ciudad de Aranjuez, porque allí murió en el año 1931, cuando pintaba sus jardines.
Santiago Rusiñol i Prats, pintor, escritor y dramaturgo español en lengua catalana, nacido en Barcelona (1861) Nació en el seno de una familia de industriales del textil, procedentes de Manlleu. Se formó en el Centro de acuarelistas de Barcelona y fue discípulo de Tomás Moragas. Viajó a París en 1889, donde vivió en Montmartre junto con Ramón Casas y con Ignacio Zuloaga.El año 1908 recibió la medalla de la Exposición Nacional de Bellas Artes.
Su pintura está muy influida por los impresionistas y tiene temática paisajista, tanto rural como urbana, retratos y composiciones simbólicas de inspiración modernista. Al comienzo de su carrera incluía figuras humanas.