LA ASUNCION DE NUESTRA SEÑORA de Francisco de Goya.
Es, sin duda, la más eminente de las obras de arte que existen en Chinchón. El Cuadro fue pintado por Francisco de Goya, posiblemente en Chinchón, aunque también hay teorías muy verosímiles de que lo pintó en su taller de Madrid, y después fue trasladado a Chinchón para montar aquí el lienzo sobre el bastidor.
En Chinchón se habían vivido los terribles sucesos de los últimos días del año 1808, cuando las tropas francesas asolaron el pueblo y robaron y quemaron todas las obras de arte que había en las Iglesias de Chinchón. Camilo de Goya, hermano del pintor, era capellán de los condes en la Iglesia de la Piedad, actual parroquia de Chinchón bajo la advocación de la Asunción de Nuestra Señora. Pudo ser un encargo de su hermano o de los condes de Chinchón, aunque no hay constancia de lo que pudo cobrar Goya por pintar este cuadro. De lo que sí hay constancia es de cuando fue colocado en la Iglesia de Chinchón, por una inscripción que aparece en el bastidor del cuadro y que dice textualmente:
"Se colocó esta pintura el día 19 de julio de 1812, siendo cura de esta iglesia el señor don José Robles. La hizo don Francisco de Goya, pintor de Cámara de S.M.D. Fernando VII".
El cuadro ha tenido una vida azarosa. Durante la Guerra Civil, se traslada a Ginebra junto con otras obras de arte, por lo que no sufre ningún desperfecto grave. Cuando termina la guerra en el año 1939, antes de ser colocado el cuadro en su lugar, figuró en la exposición "De Barnaba de Módena a Francisco de Goya" que tuvo lugar en el Museo del Prado, para lo cual se hubieron de restaurar pequeños desperfectos ocasionados en el viaje.
El 30 de mayo de 2003, para evitar los posibles daños que se podrían ocasionar por las obras de restauración de la Iglesia, se traslada el cuadro de la Asunción al Museo del Prado, donde permaneció expuesto, en calidad de depósito, hasta que se inauguró la Iglesia el 28 de enero de 2006.