Córdoba es una ciudad moderna. En nuestro paseo vamos a pasar por jardines, fuentes y grandes avenidas.
En Córdoba, también, nos vamos a encontrar con las estatuas que han levantado para recordar a los cordobeses famosos, como el filósofo Lucio Anneo Séneca que nació en Córdoba en en año 4 antes de Cristo, al gran médico Maimónides y posiblemente al torero más famoso, Manuel Rodriguez "Manolete"
También nos vamos a encontrar con las murallas árabes
Con calles típicas, donde prevalece el comercio dirigido al turismo,
Patios que se abren para solaz de los visitantes.
Calles repletas de tiestos con flores multicolores.
Con la puerta de Almodóvar, frente al puente romano junto al Guadalquivir.
Con la torre de la Calahorra, al otro lado del puente.
La plaza del Potro, donde está una antigua posada que lleva el mismo nombre y de la que ya hablo Cervantes, y el Museo dedicado a Julio Romero de Torres.
Llegaremos a la plaza de la Corredera, que nos recuerda a tantas plazas mayores de nuestra geografía.
Para llegar al Cristo de los faroles,
La Iglesia de Santa Marina de Aguas Santas.
Y la infinidad de campanarios de las Iglesias que pueblan todo Córdoba, con sus colores azulones, ocres y albero que destacan en el paisaje cordobés.
Para terminar en un restaurante típico, donde degustar los flamenquines, el salmorejo, las berenjenas con miel o el rabo de toro, regado todo ello con una buen fino de la tierra, y donde descansar de los calores que nos han acompañado durante toda la jornada.
Las fotos, de m.carrasco.m