Me acaban de comunicar que me van a inscribir en la lista oficial de curados; no se con que número, y la verdad es que no me importa demasiado; los tests que me han hecho, han dado negativo y me mandan al Hotel Colon para terminar la cuarentena.
Es el momento del agradecimiento a todos los profesionales que nos han ayudado y que lo han hecho posible.
Primero, gracias; después deciros que
!No queremos vuestros aplausos!
Es el momento del agradecimiento a todos los profesionales que nos han ayudado y que lo han hecho posible.
Primero, gracias; después deciros que
!No queremos vuestros aplausos!
Sabemos que es costumbre despedir con un aplauso al paciente que es dado de alta. Pero yo hoy quiero deciros que no queremos vuestros aplausos ; Pero no porque no los agradezcamos, sino porque nos llevamos de vosotras y vosotros algo mucho mejor: vuestro cariño, vuestra profesionalidad, vuestra dedicación, vuestra proximidad en estos días en los que la soledad podría haber debilitado aún más nuestras almas en estos cuerpos enfermos y ya algo decrépitos.
Han sido muchos días, prácticamente un mes, y muchas noches en los que vuestra alegría ha sido el mejor antídoto para nuestra soledad... solo sentimos no haber podido ver vuestras caras, y vuestro pelo, que una de vosotras me ha asegurado que si tenéis,, aunque nunca lo hayamos podido ver por esos gorros extraños que tenéis que llevar como protección.
Solo sentimos que si un día nos cruzamos por la calle no nos vamos a reconocer; Cristina, Azucena, Angela, Yolanda, Ruben, Ana y todas las enfermeras de la segunda planta de las que no se todos sus nombres, que durante estos días nos habéis acompañado.
Nos quedamos con esa mano sobre nuestro hombro, con ese sutil apretón de mano en esos momentos en que presentiais que lo necesitábamos, con esa sonrisa que nos alegraba el día.
Posiblemente no lleguemos a reconoceros si nos cruzamos por la calle; pero no importa demasiado porque sabéis que desde ahora ocupáis un lugar de privilegio en nuestro corazón.