Efectivamente, hace 62 años, el 15 de abril de 1957, se producía en la Alcoholera de Chinchón un terrible accidente en el que perdieron la vida cuatro empleados de esa empresa.
Julián Gómez Hernández de diecinueve años, Santiago Roldán Roldán de veintitrés, Valentín Roldán Delgado de cincuenta y tres, y Domingo García Villalobos de cuarenta y uno, estaban realizando su trabajo, que ese día consistía en la comprobación del estado del orujo que estaba fermentando en uno de los silos.
Julián Gómez, bajó al silo para comprobar el estado de fermentación y cayó desvanecido, debido a las emanaciones de gas que se habían producido dentro del silo por la fermentación del orujo.
Santiago Roldán bajó socorrerle, siguiendo la misma suerte. Después bajaron sus otros dos compañeros que también quedaron atrapados en el silo.
Se avisó a una dotación de bomberos de la Capital, que cuando llegaron, y ya con medios apropiados no pudieron sino rescatar los cadáveres de los cuatro infortunados operarios.
El hecho causó, como era natural, una honda conmoción en todo el pueblo, que al día siguiente acompañó sus cuerpos hasta el cementerio.
Pero también la noticia tuvo eco en la prensa nacional. El Periódico El Caso, publicó un amplísimo reportaje con gran información gráfica y la noticia también se publicó en el Periódico ABC del día 17 de Abril de 1957.
Hoy, 62 años después, recordamos este trágico accidente como recuerdo a los cuatros paisanos que fallecieron aquel día.