Parafraseando a Cicerón, nosotros también nos preguntamos: ¿Hasta cuando?
¿Hasta cuando va a abusar de nuestra paciencia es Covid-19?
Y nadie sabe contestar... porque lo único que parece seguro es que nadie tiene una idea clara de lo que está pasando. Sin embargo estamos sufriendo a diario la verborrea de tantos opinantes, entendidos e ignorantes, que no paran de dar opiniones, que al día siguiente suele desmentir la realidad.
Claro está que entre tantas opiniones la mayoría de las veces bienintencionadas, no faltan las salidas de tono, los bulos y las decisiones “políticas” que son difíciles de entender y, por lo tanto, de asumir.
La realidad es que no sabemos el “hasta cuando” y mientras, lo mejor que podemos hacer es cuidarnos y exponernos lo menos posible al contagio.
Es verdad que hay muchas personas que lo están pasando mucho peor, y no solo por la enfermedad, sino también por las consecuencias económicas que se están derivando de esta situación.
Pero de poco sirven las manifestaciones protestando por las restricciones que se imponen; y mucho menos las declaraciones de los políticos echando las culpas de lo que está ocurriendo a los contrarios sin aportar soluciones... cosa lógica por otra parte, porque nadie conoce realmente la respuesta a nuestra pregunta, aunque las decisiones de algunos políticos son difíciles de explicar y de entender, como no sea por sus incondicionales seguidores para los que lo que digan sus líderes “va a misa”.
Dicen que no hay bien ni mal que cien años dure... todo esto pasará, llegará la vacuna, volveremos a una normalidad, aunque sea diferente a la que teníamos... Lo único que podemos hacer es tener paciencia y pedir que podamos contarlo y ayudar a los más perjudicados.. y, por supuesto, hacer caso a los técnicos que posiblemente sean los únicos que pueden tener una ligera idea de lo que está ocurriendo.
Todo lo que no sea eso, no tiene sentido hasta que no podamos responder a la pregunta:
¿Quousque tandem?