Pensaban que esa impunidad duraría para siempre.
EL ARTE DE TERGIVERSAR.
Dice el diccionario que tergiversar es dar una interpretación errónea o falsa a algo, a menudo con voluntad de ello.
En estos días de ebullición política estamos asistiendo a como los distintos
Partidos políticos están haciendo unas ejercicios de tergiversación que demuestran su gran dominio en este arte, en el que, desgraciadamente, están alcanzando unos niveles de alta especialización.
Una sentencia condenatoria en el “Caso Gurtel” se convierte en boca de los condenados en una sentencia absolutoria, simplemente añadiendo la palabra “penal” o “política”, y todo esto dicho sin el menor rubor y con una rotundidad que puede hacer dudar a todo aquel lego en temas legales.
Luego, hay que añadir aquello de “Los que quieren destruir España”, los “antisistema”, los “populistas”, Etc. Etc., y ya el compareciente considera que no es necesario aportar más argumentos para defender sus postulados.
Y casi nadie se para a pensar qué o quiénes son los que quieren destruir España o los que son contrarios al sistema, si los que se manifiestan en las calles o los que se han dedicado durante décadas a destruir las instituciones y esquilmar a todos los españoles.
Pues aunque lo digan los jueces en sentencia firme, habrá quienes todavía piensen que “los suyos” no son culpables y prefieren creer a esos magos de la tergiversación en que se han convertido muchos de nuestros políticos.
Y como ejemplo, este es el argumentarlo del Partido Popular con motivo de la sentencia de la Gurtel y la moción de censura presentada por el PSOE:
Es evidente que el PP es mucho más que diez o quince casos aislados»
El presidente de la Xunta y líder del PP gallego, Alberto Núñez Feijóo, y la vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, Andrea Levy, ha sido de los pocas en desmarcarse de manera pública de la dirección del PP y han exigido «pedir disculpas» tras la condena por el 'caso Gürtel'.