La Capilla Sixtina es la capilla más famosa del Palacio Apostólico de la Ciudad del Vaticano, la residencia oficial del Papa. Se encuentra a la derecha de la Basílica de San Pedro y originalmente servía como capilla de la fortaleza vaticana. Es famosa por su arquitectura, evocadora del Templo de Salomón del Antiguo Testamento, y su decoración al fresco, obra de los más grandes artistas del Renacimiento, incluyendo a Miguel Ángel, Rafael y Botticelli. Por orden del papa Julio II, Miguel Ángel decoró la bóveda (1.100 m²) entre 1508 y 1512. A Miguel Ángel no le agradó este encargo, y pensó que su trabajo era sólo para satisfacer la necesidad de grandeza del Papa. Sin embargo, hoy la bóveda, y especialmente El Juicio Final, son considerados como los mayores logros de Miguel Ángel en la pintura.
Fue construida entre 1471 y 1484, por orden del papa Sixto IV, de quien toma su nombre, para restaurar la antigua Capilla Magna. El 15 de agosto de 1483,1 Sixto IV consagró la primera misa celebrada en la capilla a la Asunción de María.
Las pinturas de Miguel Angel son de todos conocidas. Si visitas la capilla, seguro que hay tanto público que lo único que miras son las bóvedas y el gran juicio final. Por eso hoy os dejo los detalles de los frescos laterales que recién terminadas las obras, pintaron un grupo de pintores que incluía a Botticelli, Pietro Perugino, Luca Signorelli y Domenico Ghirlandaio, sobre la vida de Moisés (a la izquierda del altar, mirando hacia El Juicio Final) y la de Jesucristo (a la derecha del altar). Las pinturas fueron concluidas en 1482.
Tentaciones de Cristo (Botticelli).
La última cena de Cósimo Roselli
El paso del Mar Rojo de Cósimo Roselli.
La llamada de los primeros apóstoles de Doménico Ghirlandaio
La vida de Moisés de Sandro Botticelli
Srmón de la Montaña de Cósimo Roselli
Las tablas de la Ley de Cósimo Roselli
El bautizo de Jesús de Pietro Perugino
Las tentaciones de Cristo de Pietro Perugino
Entrega de las llaves a San Pedro de Pietro Perugino
Testamento y muerte de Moisés de Luca Signorelli
Castigo de Coré, Datán y Abirám de Sandro Botticelli
Desde la época de Sixto IV, la capilla ha servido como lugar de diversas actividades papales. Hoy es la sede del cónclave, la reunión en la que los cardenales eligen a un nuevo Papa.