Como ya es tradicional, hoy día 25 de julio, día de la Fiesta del Apóstol Santiago, se celebra el primer encierro del año en Chinchón. La mañana amaneció agradable y a las nueve en punto de se disparó el cohete que anunciaba el inicio del encierro.
El espectáculo se desarrolló sin incidencias, disfrutando los aficionados de las carreras de los toros, que este año, por motivo de las obras de restauración de la ermita de San Roque han recorrido un trayecto nuevo, bajando por la calle del Espejo, como ya se hacía antaño.
Como es normal en este primer encierro, nos acompañaron muchos aficionados de los distintos pueblos de la comarca. Aquí vemos lo contentos que estaban estos jóvenes de Villaconejos, que quisieron posar para el blog.
Como es normal en este primer encierro, nos acompañaron muchos aficionados de los distintos pueblos de la comarca. Aquí vemos lo contentos que estaban estos jóvenes de Villaconejos, que quisieron posar para el blog.
La manada llegó a la plaza, que estaba totalmente llena de aficionados.
Luciendo como en los mejores días de fiesta.
En último lugar subió en toro de capea que se soltó a la plaza para los recortadores de Chinchón y de los alrededores que tanta fama han conseguido en este arte.
Por último, este aficionado se tiró al ruedo para dar unos pases con la muleta, emulando las hazañas de Salvador Sánchez "Frascuelo", que en la capea del día de Santiago, del año 1863 después de hacer una gran faena a un toro de capea, fue corneado gravemente y permaneció en Chinchón durante los meses que duró su convalecencia, acogido en la posada del tío Tamayo.
Terminado el encierro, los grupos de amigos procedieron al rito del almuerzo en los soportales de la plaza mayor, y los pocos vencejos que este año llegaron a Chinchón, iniciaron la emigración hacia las tierras cálidas de África, donde pasaran el invierno.