Con este título y desde el día 8 hasta el 30 de agosto, en la sala de exposiciones de la Casa de Cultura "Manuel Alvar" de Chinchón, tendrá lugar una exposición de las obras de EDUARDO CARRETERO que junto a su discípulo JOSE ANTONIO MARTINEZ, nos ofrecen una muestra de esculturas de personajes ligados a Chinchón.
EDUARDO CARRETERO: Nació en Granada en el año 1920 y fue nombrado hijo adoptivo de chinchón en el año 2005.
"Eduardo anda ya viviendo los noventa, pero mantiene los ojos vivos, el mirar profundo, el espíritu atento, el gusto por la vida y un reconocible sentido del humor. Sigue trabajando en su taller, cogiendo aún con fuerza el cincel y la maza sin que su pulso se resienta y manteniendo su columna erguida aunque el tiempo y los pesados trabajos del pasado quieran hacerle claudicar. Dice que la escultura es el arte más duradero aunque confiesa que a él no le importa demasiado la posteridad.
En esta exposición ha querido dejarnos la memoria de Chinchón esculpida en los rostros de nuestros paisanos. Una historia viva y duradera, esculpida en piedra, barro y bronce, que nos hace revivir nuestras pequeñas historias vividas con los protagonistas de estas esculturas que durante estos días de las fiestas de San Roque, se asoman a la sala de exposiciones de la Casa de Cultura “Manuel Alvar”, para nuestro deleite y para mantener viva nuestra memoria".
En esta fotografía vemos a Eduardo delante de la estatua de Ramón y Cajal, en la facha del Hospital del mismo nombre en Madrid, posiblemente su obra más conocida.
JOSÉ ANTONIO MARTÍNEZ: Gallego, nacido en San Juan de Aznalfarache (sevilla ) en 1944, Reside en Chinchón desde 1968. Posiblemente muchos no le conozcan por su nombre y apellidos, pero seguro que todos le conocen como "El pincha", porque desde que llegó a Chinchón desempeñó las funciones de ATS.
"Descubrió tarde su vocación de artista, pero se ha entregado a ella con ilusión y dedicación, y cuenta con el apoyo y las enseñanzas de Eduardo que le ha querido acoger como discípulo.
Son sus primeras obras, pero ya demuestran una gran sensibilidad y presuponen largas horas de trabajo y esfuerzo para haber alcanzado en tan poco tiempo una apreciable calidad.
Ahora podemos admirar estas obras junto a las de su maestro".
Una de las obras de José Antonio que se muestran en la exposición.
Los textos entrecomillados son del catálogo, escrito por Manuel Carrasco, Comisario de la Exposición.