miércoles, 2 de diciembre de 2015

UNA ENTREVISTA INSÓLITA A “CON PERMISO DEL VIENTO” UN LIBRO JOVENCITO.


Uno, cuando sale por ahí se suele encontrar con mucha gente. Yo la verdad, nunca me había encontrado con un libro… quiero decir que nunca había encontrado un libro a quién hacer una entrevista.
Os lo voy a presentar. Me lo encontré, casi por azar, el otro día dándome un paseo por internet, ese parque gigantesco por donde me gusta pasear a veces. La verdad es que ya me había hablado de él un amigo, que le conocía; mejor dicho, que conocía a su padre.
A primera vista me pareció muy simpático y bastante dicharachero para su edad. Me dijo que apenas si tenía ocho meses y que su padre le había puesto el nombre de  “Con permiso del viento”, un nombre raro para un niño, pero parece que normal si se trata de un libro; y que además tenía un apellido también un tanto raro. Me dijo que era de la familia de los “Déjame ayudarte a tener un buen día”.
Le pregunté cómo se le había ocurrido a su padre ponerle el nombre tan raro de “Con permiso del viento”. Me contestó: “¿Sabes que Ortega y Gasset decía: "mis circunstancias y yo"?; Pues mi padre dice, que él iba más allá: "MIS CIRCUNSTANCIAS SOY YO". Que somos la suma de todo lo bueno y lo malo que el viento va depositando en nosotros, somos recipientes con complejo de dioses, meros portadores venidos a más con pequeños márgenes de libertad para dirigir nuestro destino. El viento manda, y es absurdo intentar comprender por qué sopla en la dirección que sopla, pues él es ajeno a cualquier medida que nosotros podamos comprender. La vida es viento, la vida es caos. Dicho esto, no nos queda más remedio que aprender a desenvolvernos con torpe y confusa soltura en él, a menudo a rastras”. Esto, según, le había dicho su padre para justificar la elección de su nombre.
Me contó también que, al principio, su padre le tenía recluido en el disco duro del ordenador, pero que ahora vive en una estantería con otros hermanos y conocidos y que está aprendiendo mucho de ellos.
Tiene otros hermanos, que se llaman:
“Un día de Terapia”. Radiografía de las emociones.
“Legado”. El arte de dirigir tu vida, y
“Diario terapéutico de un extraterrestre”. Guía para humanos. Todos ellos con el mismo apellido de Ayudar a los demás a tener un buen día.
Él no lo dice, pero tengo la sensación de que tiene algo de envidia de sus hermanos, sobre todo del mayor que ya está presumiendo en los escaparates de las librerías.  Ahora, me ha dicho, ya su padre le ha dejado salir a Internet lo que le permite que muchos, como yo, le puedan conocer.
Estuvimos hablando mucho tiempo. Intercambiamos nuestras opiniones sobre lo ocurrido en Paris, llegando a la conclusión de que todo era muy complejo, que ninguno de los dos teníamos la solución, pero que era importante que, entre tanta confusión, duda y amargura, el comprobar que cada vez hay más personas que afirman que lo que ha pasado en París además de una gran pena, es un dilema de complejo abordaje.
Me decía que siguen existiendo simplistas en ambos bandos, desde los que quieren solucionarlo exterminando a los malos hasta los que pretenden hacerlo tocando Imagine en la calle, pero la mayoría, y me gustaría pensar que esto no era así antes de la Segunda Guerra Mundial, pensamos que es un problema complejo, muy complejo, que requiere reflexión, temple y determinación a partes iguales”.

Los dos llegamos a la conclusión de que, más allá de esto, sentimos una enorme conmoción por el sufrimiento de todas esas personas y sus familiares, la misma que se siente por cualquier otra manifestación de sufrimiento que se da en este nuestro extraño y bello planeta.

Me dijo que su padre se llama Rafael Romero Rico, que es licenciado en psicología y que ha hecho un montón de cursos, y que además está muy ocupado porque no para de escribir, dar clases y atender a sus pacientes.

Me dijo que como era difícil que me lo pudiese presentar me daba su enlace en internet:  http://rafaelromerorico.com/

“Con permiso del viento” habla del noble propósito de seres pequeños haciendo cosas grandes en un mundo que es infinitamente más grande que ellos.

Yo os recomiendo que os deis una vuelta por la página, seguro que encontraréis algo de vuestro interés, pero, sobre todo, una forma de enfocar los temas de la psicología de una forma seria y profesional, pero a la vez amena, sencilla, con un enfoque literario, no demasiado frecuente en asuntos científicos, y asequible para todos.