domingo, 14 de junio de 2015

EL BASTÓN DE MANDO


Ayer en la ceremonia de proclamación del nuevo alcalde de Chinchón se echó en falta la entrega del bastón de mando, como emblema del cargo para el que acababa de ser proclamado. 

No tiene mayor importancia y con ello el nuevo alcalde no pierde ninguna prerrogativa, pero en estos casos también el protocolo es importante y es una escenificación del traspaso de poderes que se produce en ese acto.


Ignoro quien o quienes deberían haber tenido en cuenta la organización de esta parte del ceremonial, pero el hecho es que se obvió la entrega de la vara o bastón de mando.

Es solo una anécdota de la que, no obstante quiero dejar constancia, que no empaña la emotiva ceremonia que se vivió ayer en Chinchón, y que escenifica un hecho histórico, pues es la primera vez que una lista no presentada bajo las siglas de la derecha, obtiene mayoría en unas elecciones democráticas municipales en Chinchón.


Nota: Como veis en la primera fotografía que ilustra esta entrada, hoy día el problema puede ser subsanado fácilmente, recurriendo al tan denostado photo-shop.

Otra Nota: Hablando de protocolo, ayer en la crónica del acto de investidura, daba al nuevo alcalde el tratamiento de Ilustrísimo. Un asiduo lector me indicaba que el alcalde de Chinchón no tenía este tratamiento, sino el de Señor.
Como siempre, agradecí la rectificación, pero le indiqué de forma personal que en el año 1926, S.M. el Rey Alfonso XIII concedió al Ayuntamiento de Chinchón el tratamiento de Excelentísimo y que yo tenía entendido que desde ese momento los alcaldes de Chinchón ostentaban el tratamiento de Ilustrísimo Señor Alcalde de Chinchón.
Me gustaría que el que tenga datos fehacientes del tema me lo comunique, para rectificar o ratificar la información. Gracias por adelantado.