sábado, 9 de agosto de 2008

OTROS RECUERDOS.

(La clase de don Lorenzo)
Mi amigo José Luis París me manda este correo, con la fotografía incluída, que os trascribo: (Con su permiso, claro)
“Como de vez en cuando me meto en tu blog, leí tus comentarios a cerca de la inauguración del colegio público HERMANOS ORTIZ DE ZARATE. Por supuesto que me trajo innumerables recuerdos ya que durante casi nueve largos años estuve yendo día tras día a ese colegio, mis notas de puntualidad eran excelentes, hice muy pocos novillos.
Según dices a partir del 7 de octubre de 1951 se trasladaron oficialmente las clases al nuevo grupo escolar. En esas fechas había tres maestros oficialmente para los niños: D.Lorenzo y D.Gregorio que daban las clases en dos aulas que había en un edificio de la calle de los Huertos el cual tiraron cuando hicieron el parador de turismo y D. Ramón que daba las clases en un aula de su domicilio de la calle de Morata frente a la posada,donde tu vivias y hoy sede del MUSEO ETNOLOGICO.
Tambien habia otro maestro no oficial que se llamaba D. Fernando el cojo, tenia una minusvalia en una pierna y daba clases en su domicilio previo pago de una pequeña cantidad al mes, decian que era muy buen maestro a pesar de que no tenia la carrera. No se por que razón yo siempre fui con este señor supongo por la cercania a mi nuevo domicilio de la Costanilla. Anteriormente, cuando vivia en la bodega fuí a los párvulos con Doña Matilde esposa de D. Ramon.Cuando hicieron el traslado a cada alumno en un primer momento nos pusieron con los maestros que teniamo y a los de D. Fernando como no le dieron plaza en el nuevo colegio nos distribuyeron con los maestros ya esistentes mas otros dos nuevos hasta completar las cinco aulas de que se componia el colegio.
Posteriormente se hizo una selección y por los conocimientos que tuvieramos a cada alumno se le mando a su grado correspondiente. A mi me tocó con D. Lorenzo y con él estuve todos los años de mi estancia en ese colegio, le veia mas que a mi padre y por supuesto aunque no le quisiera tanto como a él algo de cariño si que le cogí. No le vi nunca pegar a ninguno de sus alumnos, era una persona extraordinaria.A D. Fernando posteriormente, cuando inauguraron la primera biblioteca municipal de Chinchón que tenia su sede en el aula anteriormente citada donde daba las clases D. Gregorio, le dieron el cargo de bibliotecario, siendo por lo tanto el primer bibliotecario que tuvo Chinchón.
El complejo contaba, es verdad, con piscina pero yo nunca me bañé en ella, en mayo de 1952 me escayolaron una pierna por una artritis reumatoide y estube sin ir al colegio durante los meses de verano de ese año en el que me parece que por primera y unica vez se hizo uso de la piscina. Porque entre las pertinaces sequias de la época, la falta de agua en verano y el rápido deterioro da las instalaciones yo no recuerdo que en alguno de los años posteriores se llegara a utilizar. Me contaba mi hermano y Pepe Frutos que es a los que preguntaba que cuando se bañaban las chicas bajaban las persianas de las aulas de los chicos por si en algún descuido del maestro a alguien se le ocurria mirar.Asi que otra vez a bañarnos a la Fuente- bodega o a buscarle las vueltas al guarda de la PILILLA o alguna alberca de los huertos de alrededor del pueblo.
Tengo la impresion de que he llegado siempre tarde a todas partes. Espero no llegar tarde a mi último deseo: morir en paz y sin dolor, no soporto ver sufrir a los demas y que los demas tengan que sufrir por mi. Porque a medida que me voy haciendo mayor me cuesta mas trabajo creer en Santa Ana que dicen que rezándola te da una muerte serena y con poca cama”.

(Boceto para el cuadro "Foto de Colegio)