jueves, 26 de enero de 2023

ERILL DEL VALL, FIN DE RECORRIDO



Para terminar nuestro recorrido por El Valle de Bohi hoy llegamos a Erill la Vall que es un pequeño pueblo ubicado en un entorno natural privilegiado, en la comarca de la Alta Ribagorza perteneciente al Pirineo Catalán.

El pueblo localizado a la derecha del río Noguera de Tor, nos sorprende por la paz que se respira, tan solo nos acompaña el canto de los pájaros mientras caminamos por sus estrechas calles adoquinadas, que en su totalidad como casco antiguo está declarado patrimonio de la humanidad por la Unesco. Derivado de esta declaración, se construyó en Erill el Centro del Románico del Valle de Bohí. Situado junto a la iglesia, ofrece visitas libres y guiadas a todos los edificios incluidos en el catálogo.


Este pueblo de La Vall de Bohi, con menos de 100 habitantes, nos sorprende una vez más por su Iglesia, declarada también patrimonio de la humanidad. La Iglesia de Santa Eulalia pertenece al conjunto de Iglesias Románicas del Vall de Bohi. Nada más entrar vemos un pórtico decorado con unos arcos y justo en frente el cementerio típico de esta zona. No hay lápidas, tan solo cruces el nombre y la fecha. Una vez dentro podemos ver una réplica de “descendimiento de la cruz”.


Esta Iglesia Románica de arquitectura Lombarda del Siglo XII tiene una torre campanario de 6 pisos, 23 metros y es la más alta del conjunto de Iglesias Románicas del vall de Bohi. Se puede subir a lo alto del campanario para disfrutar de las vistas.


Desde Erill la Vall podemos disfrutar de su entorno privilegiado ya que estamos muy cerca del Parque Nacional de Aigüestortes, el Vall de Bohi y el conjunto de Iglesias Románicas.




Pero no hay que confundir con Erill Castell, en el vecino Valle del Viu, un pueblo ahora deshabitado que fue cabeza del Condado del mismo nombre que creará el rey Felipe III el 13 de julio de 1599 a favor de Felipe de Eril Aymerich, y actualmente esta emparentado con el Condado de Chinchón pues su titular es don Alberto Álvarez de Toledo y Mencos.


En Erill Castell solo se conservan las ruinas del castillo que fue residencia de los primeros barones de Eril, señores de estos territorios.