lunes, 10 de octubre de 2022

LA BUENA NOTICIA




Yo no estudié la carrera de periodismo, pero dicen que lo primero que te enseñan allí es que no es noticia el que un perro muerda a un hombre, sino que lo que verdaderamente es un notición es que un hombre muerda a un perro.

También deben enseñar que lo que verdaderamente vende en los periódicos son las malas noticias y que las buenas, apenas si lo son. Bueno, en los periódicos, en la televisión, en la radio y en todos los medios sociales. Por eso, posiblemente, todos estos medios se nutren de malas noticias.

No vamos a hablar de las noticias falsas, de las medias verdades ni de las burdas mentiras, que eso si que vende en estos medio; pero es curioso que las buenas noticias sean tan poco atractivas para el público en general. 

Pensad en una revista o en una televisión que solo diesen buenas noticias: Que ha bajado el recibo de la luz; que los ancianos reciben un trato exquisito en las Residencias públicas; que no hay listas de espera en la Sanidad pública; que el paro ya es residual; que Putin ha finalizado la guerra de Ucrania retirándose de los territorios ocupados; que los políticos han desterrado para siempre los insultos en los parlamento; que los ciudadanos dan un notable alto de valoración a los políticos; que se ha renovado el Consejo del Poder Judicial, que en las televisiones y radios, no está permitido meterse en la vida privada de los ciudadanos, aunque sean famosos; que se ha descubierto un remedio para el Cáncer; en fin, solo buenas noticias. 

¿Qué pasaría? Pues un desastre. Que esa supuesta revista, no tendría más de dos o tres paginas. Que los telediarios de esa television no durarían más de dos o tres minutos. Ya digo, un desastre.

Cristo dijo que nos dejaba una buena noticia con su evangelio, y por lo que se ve, cada día se lee menos.

Pero yo creo que esto de las malas noticias no es solo por la rentabilidad; yo creo que en esto de llenar los medios sociales de malas noticias tiene otra finalidad premeditada. Pretenden meternos el corazón en un puño; que estemos todos un poco “acongojados”; que pensemos que todo está muy mal, que vamos al desastre final; en fin, que no hay solución... y esto, ¿A quien beneficia? Pues eso, que cada uno saque sus propias conclusiones. Y recordad que dentro de unos meses llegan las elecciones...

Así que, a pesar de lo que veáis en televisión, leáis en los periódicos o escuchéis en la radio, de vez en cuando, nos llega alguna buena noticia; tened un poco de fe y, sobre todo, no os creáis todo lo que se dice.