miércoles, 19 de julio de 2017

SEMBLANZAS DE CHINCHÓN.X. LOS ORÍGENES DE CHINCHÓN.


10.- Los orígenes de Chinchón. (Historia)

Distintos historiadores nos han contado los orígenes de Chinchón, remontándose a los tiempos neolíticos, a la civilización carpetana, al periodo romano y visigodo, y a la llegada de los árabes.
Sin embargo, todos los datos que aportan están referidos al territorio de lo que hoy es el término municipal de Chinchón, pero no al pueblo.
El primer documento histórico que existe, en el que se nombra expresamente la aldea de Chinchón, está datado el día 11 de octubre de 1375, del que se conserva un testimonio notarial del año 1501 que autentifica su contenido, y está depositado en el Archivo histórico de Chinchón.

En este documento se indica que el Concejo de la Ciudad de Segovia, que era propietario de la dehesa boyal de Valdechinchón, que se encontraba dentro del término del concejo de la aldea de Chinchón, hace donación del valle indicado al Concejo y hombres buenos de Chinchón para que tengan una dehesa donde pasten los bueyes con los que labran sus tierras.

Sin embargo, hay un documento fechado el 15 de Agosto de 1302, (Copia de 1787, Archivo Histórico Nacional. Sección de Diversos. Concejos y Ciudades. Leg. 202, fols. 6, 39. Fechado el 15 de Agosto de 1302.) que trata sobre la Ocupación de la zona sur de la Sierra y repoblación de la misma por el concejo de Segovia”. Realmente es una certificación del documento de compraventa efectuado por los caballeros escuderos dueñas, doncellas de las cuatro cuadrillas de los quiñones, tierras, construcciones y término que poseen en el lugar de las Chozas, al concejo, alcaldes, alguaciles y oficiales del concejo de las Chozas, jurisdicción del Real de Manzanares, efectuada el 3 de marzo de 1443.

Pero anexo a esta certificación está el documento original de la escritura de compraventa de estas tierras. Al inicio de esta escritura de compraventa se inserta la trascripción de otro documento que como he dicho está fechado el 15 de agosto de 1302 que, según se indica, estaba escrito en un pergamino de cuero y que había desaparecido.

En este escrito se recoge información de los inicios de la ocupación, repoblación y colonización de estos territorios llevada a cabo por la Ciudad de Segovia y sus caballeros quiñoneros, en el que no aparece el pueblo de Chinchón, como sí Bayona (Titulcia), Sietepozuelos, Villaconejos, San Martín, o Chozas.

Hay que indicar que después de la conquista la ciudad de Toledo por Alfonso VI, con la ayuda de las municipalidades de Segovia, Valladolid y otras ciudades castellanas; en el año 1139  decide, para consolidar y asegurar para el futuro sus conquistas, iniciar una política de repoblación y fortificación de las villas y Ciudades que iba conquistando y que, en su mayoría se encontraban prácticamente desoladas y abandonadas por motivo de los largos años de luchas con los musulmanes. Cede estas tierras conquistadas a los capitanes que le habían ayudado en la campaña y anima a sus vasallos para que sean los pobladores de estos territorios, otorgándoles grandes concesiones, franquicias y privilegios, ya que las tierras carecían de valor si no estaban cultivadas.

En el documento citado se indica que los colonos que quisiesen acogerse a los beneficios que se ofrecían, deberían construirse una casa, iniciándose las construcciones en el pueblo de Bayona, no pudiéndose edificar en otro sito hasta  que se completase “su cincho adentro”, es decir, su casco urbano.
Cuando esto ocurrió, debieron buscar la ubicación para una población que tuvieses una mayor capacidad. Las tierras de la vega del Tajuña, que eran las más fértiles, no reunían las características de salubridad idóneas para una población; por lo que debieron buscar el asentamiento a diez kilómetros de distancia, en la meseta, donde encontraron varios manantiales que aseguraban el agua de los futuros habitantes.

Hasta allí dirigieron a los pobladores de los cinco asentamientos que había a lo largo del río Tajuña: Eza, Villaverde, Monasterio, San Galindo y San Juan o el Molar a los que se iban uniendo los colonos que llegaban a labrar las tierras.
Según estos datos, aunque no disponemos de ningún documento que garantice la fecha exacta de la fundación del pueblo de Chinchón, podríamos asegurar que esta debió producirse en el intervalo de los setenta y tres años que van de 1302 a 1775.
Lo que sí se puede asegurar es que la primitiva aldea de Chinchón creció rápidamente. Los Quiñoneros estaban formados por cuatro escuadrillas, denominadas de San Esteban, San Martín, San Millán y la Santísima Trinidad. La primera de ellas fue la que se estableció en el territorio de Chinchón, y a este santo se dedicó la pequeña ermita que fue construida en el nuevo asentamiento, y que ahora está dedicada a San Antonio Abad. A su alrededor empezó a crecer el pueblo de Chinchón.
Plano de Chinchón de Manolo Gómez-Zía y Carlos Alonso Herreros.



El Eremita.
Relator independiente.