EL SEMICURADO DE "LA ROSA AMARILLA" DE CHINCHÓN, PREMIADO EN LA WORLD CHEESE AWARDS 2016.

Hace ya más de treinta años, la familia formada por José María Punzón y Gumer Galan,   se trasladan de Consuegra a Chinchón, buscando nuevos pastos para su ganado. Junto a sus hijos se instalan en un caserío de una finca llamada “La Jara Baja”, donde siguen elaborando un auténtico queso artesano puro de oveja, siguiendo la tradición familiar de más de cinco generaciones.

 La marca “La Rosa Amarilla” nace ante la necesidad de poner un nombre a los quesos. En aquella época los quesos se moldeaban en pleitas de esparto y casillas de madera con relieves para imprimir en las caras planas del queso la llamada “flor”. Ahí comienza la idea de Gumer, que con el tiempo se convierte en la marca y logotipo de la empresa.

Diez años después, en vista de su exitosa trayectoria, adquieren su propio terreno situado en la vega de Chinchón, ampliando las pequeñas instalaciones con las que contaban en la Jara Baja.

Tras la jubilación de Jose Mª y Gumer, los que se dedican a este noble arte son Jose, Carlos y Gema, que forman la sexta generación de queseros.

Y es ahí, en la vega de Chinchón, muy cerca de Titulcia, es dónde siguen elaborando manualmente el auténtico queso artesano puro de oveja, de inconfundible sabor.

Participan en todas las ferias gastronómicas de Madrid culminando la promoción de sus productos presentándose al Concurso más prestigioso del LA WORLD CHEESE AWARDS 2016 que se celebró el pasado 16 de noviembre en San Sebastian. Un jurado formado por 260 expertos analizo los 3.061 quesos que este año optaban al máximo galardón, la cifra más altas en las 28 ediciones que se han celebrado hasta ahora.El primer premio lo consiguió un queso artesanal noruego y nuestros paisanos de LA ROSA AMARILLA, de CHINCHÓN, que se presentaba por primera vez a este concurso, obtuvo la medalla de BRONCE en su categoría, por su queso Semicurado. 

Con independencia de lo que ha dicho el jurado de San Sebastián, tengo que afirmar que el queso semicurado de La Rosa Amarilla está muy bueno,.. como el curado... y los otros quesos que fabrican, y aquí en Chinchón lo sabemos desde hace ya mucho tiempo. ¿Verdad? 

LA ROSA AMARILLA ESTA EN EL KILÓMETRO 51 de la carretera M404. 28370 CHINCHÓN 

ESTA  ABIERTO TODOS LOS DÍAS DEL AÑO De Lunes a Domingo, de 09:00 a 19:00 horas. EN HORARIO ININTERRUMPIDO

LOS PRODUCTOS DE ARAGÓN.

Una de las "obligaciones" del turista es investigar sobre los productos autóctonos del lugar que visita. Durante estos últimos días he ido publicando una serie de artículos sobre mi viaje a tierras de ARAGÓN. He hablado de su arte, de sus paisajes, de su naturaleza y de sus monumentos; me queda hablar de sus productos.

Y las tierras de ARAGÓN tienen muchos y buenos productos. Sus vinos, con sus denominaciones de origen, como el de Cariñena, Somontano, Campo de Borja y Calatayud; sus aceites que se dan en sus tierras altas, sus chacinas y sus jamones con la denominación de "Teruel"; los quesos de leche de oveja, de cabra y de vaca, curados, de "pañoleta" y de moho azul, que se sirven con un chorrito de aceite de oliva virgen y son un manjar exquisito.

Las frutas escarchadas, la miel, las conservas de mermeladas y geles; las conservas de setas, los pâtés de pato, de cerdo y de caza... en fin, todo un surtido excepcional que en una pequeña tienda de Alhama de Aragon, se han encargado de seleccionar, para poder ofrecerlos a sus clientes, cuidando de hacer una promoción efectiva en los establecimientos hoteleros de la zona.

Aunque no os puedo hacer llegar su sabor, si, al menos, os dejo su imagen, para daros un poco de envidia.

QUE CUNDA EL EJEMPLO.

Se van a cumplir, dentro de unos meses, los 164 años del nacimiento de la Sociedad de Cosecheros de Vino, Vinagre y Aguardiente de Chinchón, más conocida como "La Mojona", que durante más de ochenta años canalizó la actividad económica de nuestro pueblo y que tanto hizo por su progreso y su promoción, colaborando en todas las actividades que se desarrollaron aquí durante esos años. (1853-1938)

Una sociedad que supo adelantarse a su tiempo y que contribuyó a mejorar las infraestructuras del pueblo y a mejorar la convivencia entre todos, consiguiendo que sus beneficios también repercutiesen en el pueblo.

Era una sociedad compuesta por los mayores contribuyentes y potentados, pero que hicieron partícipes de los beneficios de su actividad a toda la población.

Ahora, las actividades económicas de nuestro pueblo han cambiado mucho. Chinchón ya no es un pueblo agrícola, ni industrial en el sentido tradicional de la palabra. Chinchón, es ahora, un pueblo netamente turístico y de esta nueva industria viven una serie de convecinos, por lo que parece lógico que nuestras autoridades se afanen en promover y apoyar esta actividad. 

Una actividad que se basa, además de en un buen servicio, en la promoción y su presencia en los medios de comunicación. 

En esta promoción colaboran, casi siempre desinteresadamente, además de los organismos oficiales, una serie de organizaciones y personas particulares, sin ánimo de lucro, que organizan actos culturales y recreativos - no hace falta hacer una relación detallada de los mismos - que ayudan a la promoción de nuestro pueblo.

Sería digno de elogio que lo mismo que los responsables de la Sociedad de Cosecheros, antaño, consiguieron que de los beneficios del arbitrio de "mojona" participase todo el pueblo; en la actualidad, los componentes de la Asociación de Turismo liderasen iniciativas que también tiendan a que su propio beneficio sea provechoso para el resto de los ciudadanos, que la mayoría de las veces solo participan de las incomodidades que ocasiona el turismo.