sábado, 16 de abril de 2016

UN FIN DE SEMANA DE CINE EN CHINCHON... Y TAMBIÉN DE MATEMÁTICAS.



16 Y 17 DE ABRIL:
FIN DE SEMANA DEL CORTOMETRAJE EN CHINCHÓN.



Este fin de semana presentaremos una serie de cortometrajes en la Biblioteca Municipal “Petra Ramírez” con motivo de la 18ª Semana del Cortometraje de la Comunidad de Madrid. 

En la sesión del sábado 16, dedicada a jóvenes y adultos, habrá dos bloques: “Relaciones Personales” y “Mujeres en Corto”, que comenzarán a las 17.00h y a las 18.30h respectivamente. El primer bloque nos hace llegar algunas historias personales, y el segundo bloque, “Mujeres en Corto”, trata sobre historias en las que las mujeres son las protagonistas. Además, tras finalizar cada una de las sesiones habrá un debate y tertulia, donde todos los asistentes podrán participar y dar su opinión. La duración aproximada de cada una de las sesiones es de una hora.

La sesión del domingo 17 será exclusivamente infantil, habrá dos bloques de cortometrajes, la primera sesión comenzará a las 17.30h y la segunda a las 18.15h. La duración aproximada será de una hora y media, incluido el descanso entre ambas.

La actividad es gratuita.

¡Os animamos a niños, jóvenes y adultos a que disfrutéis y participéis de estas jornadas!

                                                

GYMKANA MATEMÁTICA DE LA 
COMUNIDAD DE MADRID

El domingo 17 de abril, la Concejalía de Educación, Infancia y Juventud, paticipa en la Gymkana Matemática de la Comunidad de Madrid, creada por la Escuela de Pensamiento Matemático Miguel Guzmán de Madrid, en colaboración con los CTIF.





La Gymkhana comenzará a las 10’00 de la mañana y los participantes, tanto de Educación Primaria, como de Educación Secundaria, tendrán que superar 5 pruebas de lógica matemática correctamente en el menor tiempo posible.

Competirán el colegio de Chinchón Hnos Ortiz de Zárate y el Colegio de Belmonte, y en Secundaria participa el IES de Colmenar de Oreja.

Al finalizar la Gymkhana se darán tres premios, según categoría a los tres mejores grupos.

Para todo ello contaremos con ayuda de voluntarios: monitores, Cruz Roja, AMPA, Profesores de colegio e Instituto, asesores del CTIF y con una participación aproximada de 88 alumnos.

viernes, 15 de abril de 2016

PROGRAMA GEA 2016. EN CHINCHON.




¡ÚLTIMAS PLAZAS! ¡ INSCRIPCIONES HASTA EL VIERNES 15 DE ABRIL!

La Dirección General de la Mujer de la Consejería de Políticas Sociales y Familia, organiza el PROGRAMA GEA 2016, dirigido a promover la participación social y laboral de las mujeres del ámbito rural, acción cofinanciada por el Fondo Social Europeo.

En Chinchón se llevarán a cabo diferentes actuaciones dentro del Programa:

• Formación: curso de 20 h. Finales de abril o primeros de mayo 2016.
• Orientación laboral individualizada o grupal (según demanda). Últimos de abril 2016..

Para más información e inscripciones en los cursos y/o talleres de orientación laboral, pueden dirigirse a Servicios sociales: calle Álvarez Gato. Chinchón Tfno. 91 894 06 37.

jueves, 14 de abril de 2016

MIENTRAS SEGUIMOS ESPERANDO...

Una viñeta de Forges ....



Y un artículo de Manuel Vicent.

Ahora el nivel de un escándalo solo se mide por su capacidad de incendiar las redes sociales.


RESONANCIA.

El exabrupto que suelta un personaje ilustre, sea artista o intelectual; la basura infame que expande un programa de televisión; la idiotez que emite en una tertulia el pelanas más inane, toda esa excrecencia humana está irremisiblemente condenada al éxito. Cualquier insulto que lances en público en un momento de cabreo siempre encontrará un número de oyentes o lectores que estén de acuerdo, y si eres conocido te abordarán por la calle para felicitarte. Lo que importa hoy es la resonancia. Nada más fácil. Se han colapsado las centralitas, se decía antiguamente como prueba del impacto de un suceso; ahora, el nivel de un agravio solo se mide por su capacidad de incendiar las redes sociales. La cultura y la política española están pobladas de gente airada, de cualquier edad e ideología, que compite por ocupar como héroe del día la plataforma digital a cambio de exhibir las vísceras. La ira es una corona que sienta muy bien en la cabeza de los jóvenes, pero nada hay más patético que un viejo cabreado, y mucho más si es un escritor, intelectual o artista pasado de época, que busca la resonancia mediática dando lanzadas. A una edad, la única resonancia favorable es la magnética, que se utiliza para detectar algún deterioro interior del cuerpo, pero a veces sucede que uno cree que es cólera contra la injusticia lo que en el fondo solo es odio enfrascado contra uno mismo al verse tan viejo en el espejo. La propia imagen deteriorada te obliga a recordar la seducción, los sueños y el humor perdidos, lo bien que escribías, pintabas, ligabas cuando eras un joven radical de izquierdas. Podrías creer que con asaltos coléricos vas a recuperar protagonismo y resonancia en la Red, pero, lo dicho, un viejo solo debe buscar la resonancia magnética para descubrir si es odio o frustración lo que arrastra uno por dentro.

Y para terminar, otra viñeta de Forges:


                                          

miércoles, 13 de abril de 2016

PROFESIONALES.



Hoy día hay muchos profesionales; demasiados. Hoy, asistes unas semanas a un taller de escritura y ya eres un consumado escritor... Casi profesional. Haces un curso de grafología o uno de informática a nivel de usuario en el Hogar del Pensionista del barrio y ya estás capacitado para diseñar una página web o conocer las más íntimas obsesiones de tu nuera con solo ver su firma. Y no digamos si ves todos los días el programa "Saber vivir" o "La cocina de Arguiñano", puedes diagnosticar los síntomas que padece tu marido con toda clase de argumentos o puedes determinar la dieta familiar más conveniente para guardar la línea y tener una perfecta salud. O sea, que hoy día es muy fácil ser profesional... O al menos, creértelo.
Hoy día, con eso de la informática, no sólo somos capaces de escribir una novela, sino que la maquetamos, la diseñamos, la ilustramos, la imprimimos y hasta se la podemos enviar a nuestros amigos, que nos dirán lo mañoso que somos, lo bien que escribimos y lo estupendo que nos ha sentado lo de la jubilación; aunque por detrás, vayan comentado que somos unos pedantes, que tuvieron que dejar nuestra novela a medias, y que ojalá  no se nos ocurra escribir ninguna más.
Y no digamos nada, si además se nos ocurre editar un blog. Eso, al principio, te da un cierto prestigio. Luego, el problema es cuando tienes que inventarte un tema diario y además ser ingenioso. Con el tiempo, no te aguantas ni tú y no tienes más remedio que enfadarte con los amigos que dejan de seguirte. 
Claro que mucho peor es lo de Facebook. Abres tu cuenta y te crees un profesional de las redes sociales, y como no sabes muy bien lo que es eso, admites como amigos a todo el que te lo pide; y si seguir el blog de un amigo es un coñazo, aguantar el Facebook de los conocidos es, sencillamente, insoportable. Y es que en eso de los blogs esta, más o menos, admitido que, por el mero hecho de abrirlo, puedas ser un profesional, pero en el Facebook, no; y no hay nada peor que un vulgar aficionado... Sobre todo para los que que ya somos "casi" profesionales, en lo nuestro; ya sea la literatura, la medicina, la grafología, la nutrición o la crítica deportiva o política.
Claro que esto no dura mucho y enseguida nos cansamos de ejercer como "profesionales". 
Afortunadamente.

martes, 12 de abril de 2016

LA ALCANCÍA.



A mí, de pequeño, los Reyes Magos me trajeron de regalo una hucha. Era de barro, con forma de botijo sin pitorro y una ranura en la parte superior, por donde se podía introducir hasta una moneda de cinco duros.
Mi madre tuvo que explicarme lo que era. 
- Es una hucha, dijo, y sirve para ahorrar.
Mi abuelo, que era menos prosaico y experto en etimología, me dijo que también se llamaba alcancía y que en ella se iban guardando renuncias y sacrificios y después te encontrarías con ilusiones impensables ahora y grandes proyectos en el futuro.
Y me dio una moneda de un real para que la introdujese por la ranura, asegurando que posiblemente me ayudase a realizar alguna gran aventura cuando pasara el tiempo.
- Y ahora, ¿cómo se saca?, pregunté.
- Ahora no se saca. Cuando la alcancia esté llena, entonces se rompe y se cuenta el dinero y será el momento de pensar en esos proyectos y esas ilusiones.
Como he dicho, entonces yo era pequeño, y posiblemente por eso no entendí muy bien lo,que me quería decir mi abuelo. 
Cuando llegó mi cumpleaños, mis tíos me dieron dos pesetas y mi madre dijo que las echase en la hucha. A mí siempre se me olvidaba lo de alcancía, como la había llamado mi abuelo, y termine por llamarla hucha, que era más fácil de recordar. 
También, de los tres reales que me daban en casa para los domingos, mi padre me decía que debía guardar uno, por lo menos.
La tenía guardada en el armario, junto a la caja de latón que fue envase del dulce de membrillo, en que mi madre guardaba los papeles que decía que eran importantes. Yo, de vez en cuando, la cogia y la agitaba para que sonasen las monedas.
- Mama,  ¡mira cómo suenan!
Aunque a mí me parecía que siempre sonaba a vacía. 
Aquella semana se anunciaba el ultimo almanaque del Guerrero del Antifaz y a mí me faltaban treinta céntimos. Mi madre dijo que esperase al domingo para comprarlo, pero me hacía mucha ilusión leerlo ya, y ya se sabe que los niños no suelen entender aquello de renunciar a los caprichos . 
Mi amigo Juliancin, del que decían que no crecía de las muchas picardías que tenía, me tenía contado que se podían sacar las monedas de la hucha con un cuchillo. Y decía que era relativamente sencillo. Se ponía la alcancía con la ranura hacia abajo. Se introducía por ella la hoja de un cuchillo y se intentaba que alguna de las monedas resbalase por ella hasta coincidir con la ranura; se iba sacando poco a poco el cuchillo y, con un poco de suerte, caía la monda fuera.
La teoría era sencilla, la práctica, no tanto. Después de bastantes intentonas, logre sacar una moneda de un real (yo creo que era la primera que me dio mi abuelo y me acorde de su profecía de que algún día me ayudaría a vivir una gran aventura y ¡qué mejor aventura que una con el mismísimo Guerrero del Antifaz!) y rebuscando por los bolsillos encontré los cinco céntimos que me faltaban y me fui corriendo al estanco de la calle de los Huertos que era donde entonces se vendían los tebeos.


A partir de entonces, y con la pericia que conseguí en el manejo del cuchillo, mi alcancía no crecía, sino que decrecía más cada semana que pasaba. Tanto, que ya no se la enseñaba a mi madre para que no se diese cuenta por el sonido a vacío que cada día era mayor.
Un tiempo después, creo recordar que se me escurrió de las manos, involuntariamente -lo juro- y en casa renunciaron a enseñarme a ahorrar.
Pero, mira tú por dónde, hoy me he acordado de mi vieja alcancía y de aquellos tiempos en los que apenas si teníamos nada y éramos capaces de renunciar a lo necesario para mantener las ilusiones que entonces nos parecían irrealizables.
Hoy, los de aquella generación estamos preparados por si hay que seguir apretándonos, aún más, el cinturón, aunque ahora tengamos la alcancía medio vacía, como a mí se me quedo cuando era pequeño. 

lunes, 11 de abril de 2016

HACE UNA SEMANA, EL DÍA 4 DE ABRIL:FUE LUNES DE AGUAS EN SALAMANCA.


El príncipe Don Juan, hijo de los Reyes Católicos, decide crear en 1.497 una casa conocida como mancebía debido a la numerosa presencia de mujeres de “vida alegre” en la ciudad de Salamanca.
Ese mismo año el príncipe muere a la edad de 19 años. El dictamen oficial afirmaba que su muerte se debía a un esfuerzo en su amor matrimonial por dejar un heredero, pero el pueblo comentaba que la causa había sido la enfermedad contraída en su alterne con ciertas mujeres.
 
La mancebía, que fue sometida a concurso mediante pregón, se situó al lado del Colegio de Fonseca y se establecieron ciertas normas: la profesión no podía ser ejercida por mujeres casadas, con padres en esta ciudad, ni mulatas. Antes del anochecer, las mujeres debían recogerse en esta casa y permanecer en ella toda la noche. Aquellas que ejerciesen y salieran por la ciudad debían llevar las puntillas de sus enaguas de color gris parduzco como distintivo, de ahí el conocido dicho “ir de picos pardos”. 
La multa por no llevar la indumentaria ascendía a 300 maravedíes, y estaba prohibido ejercer en días de fiesta, en Cuaresma y Vigilia. El “padre putas” era el encargado del orden del barrio y de que las mujeres pasaran las revisiones médicas. La función por la que era conocido es la que ha dado lugar al famoso “lunes de aguas”. 
El Miércoles de Cenizas el padre putas reunía a todas estas mujeres para sacarlas de la ciudad y llevarlas al otro lado del río, donde pasaban los 40 días de Cuaresma. 
La octava de Pascua, 8 días después de la Resurrección, los estudiantes partían a buscar a las mujeres en barcas, ya que éstas no podían pasar por el puente romano. Las barcas iban adornadas con abundantes ramas, por lo que acabó llamándose “rameras” a las mujeres que albergaban en la mancebía. 


 Esa tarde toda la gente de la ciudad se acercaba al río para cotillear y festejar el alborozo de estudiantes y mujeres de vida alegre. En este día de campo se merendaba el hornazo, una empanada a base de harina de trigo rellena del mejor jamón, chorizo y lomo de la casa, acompañado de un buen vino. 


Hoy cada lunes de aguas los salamantinos salen al campo y algunos se acercan hasta las orillas del Tormes para festejar este día acompañados del hornazo, que también sirve acompañamiento habitual en sus meriendas o celebraciones familiares 

domingo, 10 de abril de 2016

NO TENEMOS NI IDEA.




Da una cierta ternura ver cómo opinamos de lo que va a ocurrir en el desenlace de la situación política española. Y es que, en el fondo, decimos lo que nos gustaría que ocurriese y no lo que pensamos que va a ocurrir.
La mayoría de las veces, partimos de la idea de que los protagonistas buscan lo mejor para los votantes que les apoyaron y no lo que que a ellos les conviene; y estamos muy equivocados. Ninguno de ellos, nunca, va a renunciar a sus prioridades en aras del bien común. Es metafísicamente imposible que Rivera, por ejemplo, se avenga a lo que quiere Iglesias, y viceversa, aunque sus objetivos parezcan similares, porque su ideología es totalmente antagónica.
Lo importante no es buscar una solución de consenso; lo esencial es aniquilar al enemigo. Ya lo decía Bilardo. Por eso, es tan difícil para nosotros hacer conjeturas sobre lo que pueda pasar. Al final, se hará lo que manden los "jefes", los que mandan, o sea, los que tienen el dinero y la sartén por el mango, que ya se ocuparán de que se haga lo que más les convenga... A ellos, por supuesto.



Mientras, nosotros, aquí estamos indignándonos con lo de los papeles de Panamá, las financiaciones de CEPS, el "pitufeo" de Rita y cualquier otro señuelo que nos pongan para distraernos, mientras se fragua lo que ellos han planeado.
Por eso, no sirve hacer quinielas sobre el futuro político, todo está ya decidido, y de lo único que podemos estar seguros es que "no tenemos ni idea".