Desde la Plaza Mayor de Chinchón, donde siempre ha sido costumbre despedir el año viejo y recibir el nuevo año, levanto mi copa por todos vosotros, con mis deseos de que el que viene sea mucho mejor que el año que nos deja.
¡¡FELICIDAD PARA TODOS!! Y ya de paso, he pedido a mi amiga Gertrudis Edelmira que se una a nosotros para desearos un año más alegre, más pícaro y más bullanguero