domingo, 5 de septiembre de 2010

¡BUENA LA ESTÁ ARMANDO HAWKING!

Ahora sale el bueno de Stephen Hawking con que el universo se creó de forma espontánea, cuando se dieron una serie de circunstancias físicas que fueron el detonante del nacimiento del cosmos y la posterior evolución de las especies, y que dios no tuvo nada que ver con todo esto.
Aunque estoy prácticamente de vacaciones, me ha escrito mi amigo Elpidio, y me dice que a él le recuerda esto a lo que debió armar Galileo cuando se atrevió a decir que la tierra no era el centro del universo. Entonces, lógicamente, eran otros tiempos y ya sabemos lo que le pasó al astrónomo, y cómo la iglesia esperó varios siglos hasta que asumió su error y lamentó el haber asado a tan insigne científico.

Ahora seguro que a Stephen no le pasa lo mismo, porque estamos un poco más civilizados, y a lo más que se van a atrever sus detractores es a intentar desprestigiarle y rebatir sus conclusiones.
Desde Reino Unido, tanto católicos, protestantes, judíos y musulmanes han lanzado sus críticas al científico.

El arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, en declaraciones al diario británico The Times, dijo "creer en Dios no consiste en como taponar un agujero y explicar cómo unas cosas se relacionan con otras en el Universo, sino que es la creencia de que hay un agente inteligente y vivo de cuya actividad depende en última instancia todo lo que existe", declaró el líder anglicano: "La física por sí sola no resolverá la cuestión de por qué existe algo en lugar de nada", agregó Williams.
El rabino jefe, Jonathan Sacks, señala en un artículo publicado hoy por el mismo diario que "la ciencia trata de explicar y la religión, de interpretar. A la Biblia sencillamente no le interesa cómo se creó el Universo".
Posiblemente sea bueno que ocurra ésto. Es posible que situaciones como esta sirvan para que todos los representantes de las distintas religiónes se lleguen a poner de acuerdo y empiecen a ocuparse de los temas que verdaderamente interesa a los hombres y se dejen de anatemizar a los que no piensan como ellos.
Es posible que dios “interviniese” en organizar todo esto; el dios único, el de los cristianos, los musulmanes, los budistas, los judios... en fin, el dios de todos; pero entonces, si sólo existe un dios, ¿por qué las distintas religiónes no se ponen de acuerdo en los que les une y se dedican a buscar lo que les diferencia?
Mi amigo Elpidio dice que él está completamente seguro de que es bueno que personas como Stphen Hawking, que han demostrado su solvencia científica y su independencia de conciencia, se atrevan a disentir de la “doctrina” oficial, para hacernos pensar a todos.