Ayer Sábado Santo, al anochecer, se volvió a representar la “Pasión y Muerte de Jesús de Nazaret” por las calles y plazas de Chinchón. Durante 48 años, de forma ininterrumpida ha tenido lugar esta representación que termina con la Resurrección en la portada sur de la Iglesia parroquial.
Este año, a los miles de visitantes, quiso unirse también la lluvia que no logró deslucir las realistas escenas de la Pasión. Todo lo contrario. La crucifixión adquirió unos increíbles matices de verosimilitud cuando la lluvia que caía se unió a los efectos especiales que simulaban la tormenta.
Desde aquí, la felicitación para todos los que han intervenido y colaborado en esta representación que, afortunadamente, no fue retransmitida en directo por televisión.