sábado, 25 de abril de 2009

EL RALLY “VILLA DE MADRID” LLEGA A CHINCHON.


Los amantes del automovilismo han tenido una cita en la Comunidad de Madrid los días 25 y 26 de abril, cuando se celebra una nueva edición del Rally Villa de Madrid, que en esta ocasión recupera algunos tramos que hacía tiempo que no se utilizaban.

Organizado por la Federación Madrileña de Automovilismo (FMA), este Rally saldrá el viernes a mediodía del aparcamiento de la plaza de toros de Las Ventas, donde se harán las verificaciones y la salida ceremonial, con destino a la plaza mayor de Chinchón.

El recorrido del rally, que consta de diez tramos, suma 277,7 kilómetros, de los que tan sólo 78,2 kilómetros serán cronometrados. Cuatro de los tramos se disputarán en horario nocturno, dándose la salida desde la plaza de armas del Castillo de Chinchón. Habrá dos pasadas por la 'especial Chinchón' y otras tantas por la 'especial Morata de Tajuña', acabando la jornada a las 22 horas.


Tras regresar a Chinchón, los corredores afrontarán los seis tramos restantes en la jornada del sábado de 16 a 22 horas. Se hará un doble bucle a las especiales 'La Aldehuela', que recupera la mítica subida en formato largo; la de 'Tielmes' y la de 'Morata', tramo idéntico al de la noche anterior.


La ceremonia de entrega de premios se celebrará en la plaza de toros de Las Ventas el sábado a última hora.

EL YERMO DE LA SANTISIMA TRINIDAD.

En el bello paraje del Camino de Perales, el fraile don Jesús está construyendo una capilla oratorio donde poder rezar en soledad. Este es el aspecto que podrá tener cuando se hayan terminado las obras.

Mientras tanto, les ofrezco varias panorámicas de las que se pueden ver desde allí.





viernes, 24 de abril de 2009

LA CONFUSA MEMORIA DE UN NIÑO UN POCO RARO.

Fotografía de los soportales de la Plaza Mayor de Chinchón, tomada en el año 1950.
"Éramos tan pobres que no teníamos ni traumas. Entonces tampoco conocíamos la televisión, sólo algunas radios y las bicicletas de los niños ricos. En los días de fiesta grande, como las Navidades, se comía gallina en pepitoria; y jugábamos a la pídola - las niñas a la comba - y al rescatao en la plaza. No teníamos, tampoco, balones de reglamento hasta que no los regaló el chocolate Dulcinea completando la colección de jugadores de fútbol... Puchades, César, Olsen, Ben Barek - el negrito del atleti -, Juanito Alonso que era el portero del Real Madrid... tampoco nuestros padres tenían depresiones, porque sólo tenían tiempo para trabajar de sol a sol, ellos en el campo y ellas lavando en el tinajón a la intemperie aunque estuviese helando; entonces calentaban agua en un cubo de zinc para derretir la gruesa capa de hielo que se había formado en la superficie.


En el Patio de la Posada en la calle de Morata nº 5, actual Museo Etnológico.
Lo que sí teníamos, en invierno, eran sabañones... en las manos y en los pies... rojos, grandes y perdurables hasta que llegaba de la primavera. También teníamos una cartilla, cuando éramos más pequeños, y después el Catón que guardábamos en el cabás de cartón - nosotros decíamos cabaz - con un cuaderno de dos rayas, que nos tenía que durar todo el curso, un lápiz, un borrador y un sacapuntas.En los soportales de la plaza, frente a la tienda de Antero, cambiábamos los tebeos de "Roberto Alcazar y Pedrín", del "Guerrero del antifaz" y de "Hazañas bélicas". Los nuevos se compraban en el estanco de las "Quetis" de la calle de los Huertos y creo que costaban veinticinco céntimos, o sea, un real. Luego llegarían el "Jabato" y el "Capitán Trueno" con Crispín y Goliat.

Sentados junto a las columnas esperábamos pacientemente hasta que llegaba el coche de viajeros que entraba majestuoso por la Puerta de la Villa y después de dar una torera vuelta al ruedo se veía rodeado por los familiares que recibian a sus deudos como si llegasen de fabulosas y arriesgadas expediciones y por los curiosos desocupados que no disimulaban su interés por conocer las aficiones viajeras de sus paisanos que aprovechaban la vuelta que daba el coche por la plaza para dejarse ver mientras saludaban efusivamente por la ventanilla a cualquier conocido para no pasar desapercibidos. También esperaba "el Ochoa" con su carretilla que se encargaba de recoger las mercancias que llegaban de la capital para hacer después el correspondiente reparto.

La llegada del coche de viajeros a la plaza de Chinchón. sobre el Año 1960.
A Madrid sólo íbamos para que nos viese el médico cuando don Pedro o don Marcial no solucionaba el problema que era las menos de las veces. Pocas veces para comprar, como, por ejemplo, el traje de la Primera Comunión y casi nada más. En alguna ocasión nos dejaban nuestros padres ir en el camión de melones que llevaban a vender a Legazpi y después volvíamos en el coche de viajeros, ante la admiración de nuestros amigos que no disimulaban su envidia.
Tambien iban a Madrid los pocos que estudiaban el Bachillerato y tenían que examinarse en el Ramiro de Maeztu. Cuando tenían que pasar unos días en Madrid se hospedaban en una pensión de la calle Postas. Claro que de esto me enteré unos años después.
Cuando llegaba el coche solían encenderse las luces de las calles y se producía la desbandada general de toda la chiquillería porque esa era la señal que se marcaba como tope para volver a nuestras casas.
Entonces tampoco había señales de tráfico en las calles, ni direcciones prohibidas... ni coches, claro; sólo carros, tirados por mulas, cargados de ajos y de mies en verano, de cubetos de uva en el otoño y de sacos de aceitunas en el invierno. Y a la caída de la tarde una larga retahíla de caballerías que volvían de la vega. Los burros con grandes albardas sobre las que se habían colocado las alforjas ahora ya casi vacías y que servían de asiento a los hombres ya cansados de la ruda y larga tarea, detrás las mulas uncidas a pesados arados y vertederas en cuyo extremo chirriaba un pequeño carrillo o con grandes serones en los que sobresalían los azadones, los bieldos o las estevas de los arados y, en demasiados casos, cabalgadas por un niño, arrebujado en una manta, que ese día no había podido ir a la escuela.
Eran los principios de los cincuenta. Ya entonces nos empezaban a contar que había habido una guerra y que entonces sí que habían pasado hambre... y miedo... pero éramos demasiado pequeños para contarnos más detalles... y empezamos a ir al colegio. Estaba el de don Fernando al final de la calle Morata, el de don Lorenzo en la calle de los Huertos, el de doña Matilde y don Ramón en la calle Grande por las mañanas y en la calle Morata, donde vivían, por las tardes, y el Colegio de Cristo Rey sólo para las niñas.

18 de julio de 1951, Franco llega a Chinchón para inaugurar el Grupo Escolar "Hnos.Ortiz de Zárate" Saludando desde el balcón del Ayuntamiento.

Unos años después Franco inauguró el Grupo Escolar un día 18 de julio y empezamos a disfrutar de unas fantásticas instalaciones los días que no teníamos que ir al campo para ayudar a nuestros padres, sobre todo si eras el mayor de los hermanos, como era mi caso.

Así pues, en esos años nos faltaban muchas cosas. Eran tiempos de carencias y de renuncias, pero también de disfrutar con fruición cualquier pequeña fruslería que pudiese llegar a nuestras manos. Las cosas más insignificantes podían llegar a ser fabulosos tesoros. Una hoja de papel en blanco, sin rayas, en la que poder dibujar, era casi imposible de conseguir y aprovechábamos cualquier trozo de periódico en el que había un espacio vacío para emborronarlo con nuestros "burrapatos". Pero eso era también harto difícil, porque sólo llegaba a nuestras casas como emboltorio de alguna que otra esporádica compra. Las chucherías las conseguíamos, los domingos, en el "puesto" de la tia "Nuncia", que colocaba su cesta repleta de caramelos en la Columna de los Franceses, y nos vendía las pastillas de malvavisco y los chicles de "bazoca" que cortaba en trozos con un cuchillo para poderlos dar a perra gorda..."

jueves, 23 de abril de 2009

REAPARECE LA CONDESA DE CHINCHON.


Desde hoy 23 de abril hasta el día 17 de mayo reaparece LA CONDESA DE CHINCHÓN como exposición colectiva de varios artistas gráficos que han reunido sus obras para ofrecer una recreación singular de la genial obra de Goya, inserta en el lenguaje creativo de nuestos días.

Son algunas de las obras que se pudieron admirar en la exposición que se dedicó a la Condesa de Chinchón, por el Colectivo de Artistas de Chinchón (Cach). Más concretamente estas obras estuvieron expuestas en la Casa de la Cultura "Manuel Alvar" de Chinchón, y ahora las podréis contemplar en el Café Bambalam, calle de La Villa 3 Madrid.
Es una buena oportunidad para volver a verlas o para admirarlas por primera vez.

miércoles, 22 de abril de 2009

NUESTRA ALCALDESA NOMBRADA PRESIDENTA DE LA COMISION DE CULTURA Y TURISMO.



DOÑA LUISA Mª FERNANDEZ , nuestra Alcaldesa, ha sido nombrada presidenta de la Comisión de Cultura y Turismo de la Federación Madrileña de Municipios (FMM) que de este modo pasa de ser vocal a presidenta de dicha comisión.


Desde este humilde blog quiero unirme a las felicitaciones que está recibiendo por este nombramiento y quiero desearle mucho éxito en su gestión al frente de dicha Comisión, y que desde su nuevo cargo siga apostando por la cultura y el turismo de nuestro pueblo.


¡MUCHAS FELICIDADES, ALCALDESA!

EL "CHINCHONARIO" DICCIONARIO DE CHINCHÓN.

En la fotografía se puede ver la "citarilla" de la Plazuela de Palacios desde la plaza, en el encierro de las fiestas de San Roque., tambien conocida como "balcón de las lagartijas".

Vamos con la tercera entrega de nuestro Chinchonario. Voy recibiendo algunas aportaciones de amigos y conocidos que me van apuntando, cuando nos encontramos por la calle, algunas palabras que iré añadiendo a nuestro diccionario particular. Hoya vamos con la C y la Ch.

C

Cabaña. Construcción rústica de cañas y carrizos, cortados en la laguna de San Juan, por ejemplo, que se solía hacer en la vega para dormir en los días de riego y refugiarse cuando llovía.
Cabás. (En Chinchón se decía “cabaz”) Cartera en que los niños llevaban los libros al colegio.
Cabezada. 1. Inclinación de la cabeza al saludar o dormirse. 2. Correaje que ciñe la cabeza de una caballaría
Caldereta. Además de receta de cocina, en Chinchón se decía del recipiente, generalmente de aluminio, con un sistema de cierre, para llevar la comida al campo.
Cántaro: Vasija grande de boca pequeña, con una o dos asas. En Chinchón era donde se consevaba el agua antes de llegar el agua a las fuentes.
Cao que sí. Expresión para mostrar el más absoluto acuerdo con el comentario que acabas de oír. Es muy parecido a "Tú verás".
Capacho. Bolsa de hule, lona o de fibras vegetales que utilizaban las mujeres de Chinchón para ir a la compra, antes de que se inventase el “carrito” y en las tiendas diesen bolsas de plástico.
Capador: Un señor que se paseaba por Chinchón, montado en una bicicleta y tocando una especie de armónica para ofrecer sus servicios para capar los marranos.
Capar: Extirpar o inutilizar los órganos genitales, utilizado más frecuentemente en gatos y cerdos.
Carbonero: Persona que vendía el carbón. También famoso por tener una fe muy comentada.
Carrillo: Además de la parte carnosa de la cara debajo de la mejilla y ex-dirigente del PCE, en Chinchón se llamaba a un artilugio con dos ruedas que se colocaba debaj0 del arado o de la vertedera para trasportarlos.
Cataplasma: Composición medicamentosa de aplicación externa utilizada para aliviar las afecciones bronquiales. A veces producía algunas quemaduras en la piel de los más pequeños.
Causar trastorno. Incomodar a alguien. Se suele utilizar cuando vas a pedir un favor a alguien.
Cavalitamente. La traducción al español es, más o menos, "justamente".

Celemín. Medida de capacidad equivalente a 4,625 litros. También medida agraria subdivisor de la fanega.
Cincha. Faja con la que se ciñe la silla o la albarda a las caballerías.
Cinto: Correa, cinturón y medio para manifestar la potestad paterna ante los hijos díscolos.
Citarilla. Tapia pequeña. En Chinchón la tapia de la Plazuela de Palacio, también llamada “Balcón de las lagartijas” desde donde se puede ver la plaza, muy utilizada en días de corrida de toros.
Cochambre: Cosa puerca o chapucera.
Coche viajeros. El autobús de toda la vida.
Coger vencía. Coger carrerilla.
Confiteria: Pastelería. La de Chinchón, antiguamente, estaba en los soportales.
Convidar. Es la palabra utilizada cuando quieres invitar a alguien a algo.
Consumero. Funcionario dependiente del Departamente de Consumo y Abastos. Los antiguos guardias municipales.
Cordel. Cuerda pequeña, para atar manojos de ajos, por ejemplo.
Cordelero: Además del que hace o vende los cordeles, persona pesada y que le gusta fastidiar y dar la lata.
Corral: Lugar donde se encierran animales domesticos. Antiguo excusado.
Coscorrón: Golpe en la cabeza, sobre todo de los niños.
Costal: Saco grande, principalmente utilizado para transportar el grano desde las eras.
Cuadra: Recinto donde se recogían las caballerias. Lugar generador del estiercol muy apreciado como abono para las tierras de labor.
Cuartos :Es el dinerito contante y sonante. También hay una frase hecha que indica que algo te importa tres pepinos que es: - Me importa ocho cuartos.
Cubeto: Cubo, generalmente de madera con aros metálicos, para transportar las uvas hasta el lagar. Actualmente son de goma.
Cuerno. Asta de los animales, que los tienen. Uno de toro, se utilizada para llevar al campo la sal y la pimienta. Una vez hueco, se colocaba en su interior un corcho para dividir las dos mitades; en la ancha se ponía la sal, en la estrecha, la pimienta. Se cerraba con sendos corchos de la medida correspondiente.
Cundir. Hacer algo bastante rápido y supuestamente bien.

Vista de Chinchón desde el carril. (foto: Miguel A. García Huete)


Ch

Cha galán. La expresión favorita de pequeños y mayores. Indica sorpresa y/o indignación ante algo. Se puede unir a otras expresiones como "que disparate" o "veros a tomar por culo", entre otras.
Chaval: Jovencillo.
Chinchón: Juego de cartas, copa de anís y nuestro pueblo.
Chinchonario: El Diccionario de palabras utilizadas en Chinchón.
Chispa: Además de partícula inflamada que salta, pequeña borrachera, ahora conocida como “peo”.
Chisparse: Ponerse alegre, coger una borrachera no demasiado grande.
Chita: Juego infantil que consiste en colocar derecho un trozo de caña con monedas encima, para tirarlo con los tejos. Para ver quien ha ganado se mide la distancia entre las monedas y los tejos, teniendo en cuenta si “ratean”. (En su día explicaré lo que es “ratear”.
Chumeta: Cotilla.
Chumetear:Cotillear. También es válida la expresión "gulumear" para este caso.

martes, 21 de abril de 2009

LA CURIOSA TRADICION DE PUBLICACIÓN DE REVISTAS EN CHINCHÓN.


Es, cuanto menos, curioso el hecho de que en Chinchón se hayan publicado diversas revistas desde mediados del siglo pasado, pero la realidad es que desde el año 1950 a nuestros días se publicaron en cuatro periodos de tiempo unas revistas de información social y cultural que merece la pena recordar.

Efectivamente, desde enero a junio de 1950, se publicó la Revista “VIDA”, como hoja parroquial de los jóvenes de Acción Católica. Su director, Antonio Susiac, decía en su primer número: “Así también nace con el fin de hacer el bien y para servir al hombre y en él a Dios, esta humilde hoja que lleva por título lo que es el sostén y la coninuidad de las plantas y de los seres, lo que embellece al mundo en sus múltiples composiciones y lo que sostiene al hombre sobre la: VIDA”.


En los seis números que duró la “Vida” de esta publicación, colaboraron, entre otros: Mateo de las Heras, Narciso del Nero, Gonzalo Jimenez, Jacinto Santos, Juan Colmenar, Alfredo Rodriguez, quienes nos dejaron datos sobre la vida social, con reseña de nacimientos, bodas y defunciones; de los actos religiosos y deportivos y reseñas históricas, como el descubrimiento de la quina por la virreina del Perú, y datos sobre la Sociedad de Cosecheros, conocida como la Mojona.


Que a medidados del siglo pasado, en plena posguerra y en un nivel cultural bajo, se llegase a publicar una revista es, como menos, sorprendente y digno de ser resaltado desde aquí, aunque la aventura no durase nada más que seis meses.

Tuvieron que pasar casi trece años para que se volviese a publicar otra Revista. Era abril de 1963 y el Cura Luis Lezana se embarca en la publicación de la revista “FUENTEARRIBA” que se edita hasta el mes de abil del año siguiente. Fueron 11 números en total, bajo la dirección de Luis Lezama, quien escribía en su primer editorial: “Nos presentamos hoy llenos de entusiasmo e ilusión, con el ánimo esforzado como los caballeros de medievo a esta pequeña cruzada que trata de elevar la vida de nuestro pueblo y procurar llevar a todos los hogares chinchoneses el calor de nuestro entusiasmo y el optimismo de nuestros corazones”.

Ahora la lista de colaboradores es mucho más extensa: Mateo de las Heras, Gonzalo Jimenez, Alfredo Rodriguez, Juan Colmenar, Pilar Montero, Jesús Catalán, Emiliano Montero, José Manuel de Lapuerta, Antonio Castillo, Manuel Carrasco, Gonzalo Gómez Marcitllac y Celestino Sartines, como el hombre del tiempo.

Y también los temas son más comprometidos, atreviendose a tratar temas sociales y económicos y sobre todo religiosos al amparo de los nuevos tiempos que preludiaba el nuevo Concilio Vaticano II. En estas páginas se recogió también la primera representación de la Pasión de Chinchón, en la Semana Santa de aquel año de 1963.
Como novedad, aparece la publicidad para sufragar los gastos de edición y se vende al precio de 3 pesetas el ejemplar y la suscrioción anual a 30 pesetas.

Cinco años después, en mayo de 1968 vuelve a aparecer una nueva edición que se llamó “Nuevo Fuente-arriba” y que tuvo una vida de 14 números hasta agosto-septiembre de 1969. Auspiciado por el Centro Parroquial “Club Santiago” y bajo la dirección de Manuel Carrasco, nació como periódico mural, haciéndose revista en el tercer número, editado en ciclostil, y decía en su primer editorial: “Aunque no lo parezca, aunque puede ser que muchos no lo reconozcan, este es “Fuentearriba”. Somos como un rico venido a menos, hemos tenido que despojarnos de nuestras “galas” de imprenta y salimos así, con los “harapos” de una modesta multicopista, pero no por eso desanimados, sino todo lo contrario, con deseos renovados de llegar a todos, de ser útil a todos y de -como en el deporte. contar con todos”.

Siguiendo una linea editorial parecida a la anterior contó con jóvenes colaboradores con Esther y Lily Rodriguez, Jesús García, Alberto de la Peña, José Castillo, y la participación de los “viejos rokeros” Mateo de las Heras y Alfredo Rodriguez.
Además de hacer un amplio recorrido por los temas sociales y culturales de la época, con algunos pequeños atisvos a temas socio-políticos, encontramos la reseña de la actuación de los “Pekeniques” en las fiestas de Chinchón, con una entrevista firmada por Esther Rodriguez.

Y llegamos a la última aventura editorial, y esta vez con notables novedades. Estamos en el otoño de 1994, en una situación política y social sensiblemente diferente a las épocas en que se editaron las anteriores publicaciones, vuelve a aparecer "FUENTEARRIBA". Ya no se edita desde la Iglesia, sino desde una Asociación láica: La Agrupación de Amigos de Chinchón. Su periodicidad no es mensual, sino trimestral, con algunas lagunas temporales, y perdura hasta junio-septiembre del año 2005.
Luis Lezama escribía, como edtorial en el primer número: "Aprendamos a convivir con el gesto de la palabra escrita evitando los roces de la discordia. Expresemos nuestro pensamiento haciendo llegar la sangre del alma a la punta del bolígrafo para que no corra fuera del cauce por otros vericuetos resentida. Ventilemos el cerebro, que no haya telas de araña ni marasmos de rencor ni odio que turbien nuestras vidas..."
La linea editorial se centra más en temas políticos, teniendo oscilaciones de posicionamientos diferentes en función de las tendencias de la propia asociación, aunque los distintos directores de la revista hacían grandes esfuerzos por mantener una linea imparcial, que no siempre conseguían.

El primero en dirigir la publicación fue Carlos Alonso, después se hizo cargo de ella Antonio López Prados, a continuación Alfredo Rodríguez para terminar Oscar Villegas que sólo hizo el último número, en el que intentó hacer un cambio radical en cuanto a formato y contenidos, pero que no llegó a cuajar ni tuvo continuidad.

Fueron 32 números en total en los que colaboraron muchas personas: Luis Lezama, Lucía Alarcón, Teresa de Jesús García, José Santiago Palacios, Santiago Gutierrez, Isabel Montes, Cecilio Serrano, Raúl Alonso, Manuel Carrasco, Manuel Alvar, y un largo etcétera que nos dejaron sus opiniones y las noticias de los hechos más relevantes ocurridos en Chinchón durante ese periodo de tiempo. Aquí quedan reflejadas el nacimiento (y muerte) de la “Fiesta del Ajo” y del “Vino y Aguardiente” las luchas políticas para conseguir la alcaldía de Chinchón, y la historia cotidiana de nuestro pueblo en estos largos once años.

He querido dejar constancia de un hecho curioso y digno de estudio, de cómo en un pequeño pueblo de menos de cinco mil habitantes se ha repetido el hecho de la publicación de una revista en situaciones muy diferentes en la política, en la religión, en la cultura y en la sociedad. Desde aquí, mi reconocimiento y admiración por todos los que contribuyeron a sacar adelante esta apasionante aventura.

Para los que pudiesen estar interesados, existe fotocopias de todos estas publicaciones en la Biblioteca de Chinchón.

lunes, 20 de abril de 2009

YO LO VEO ASÍ

Es una fotografía que hizo Lewis W. Hine en el año 1930 y recoge la imagen de unos soldadores encaramados sobre unas vigas, en la construcción del Empire State Building.
Yo, que padezco de vértigo, no puedo ni pensar la posibilidad de ser uno de ellos. En cambio, el soldador que está trabajando no parece importarle estar sin ninguna protección, sólo sujetado por su pierna derecha a la viga donde está trabajando y con su cuerpo en el abismo. El otro lo mira un tanto despreocupado porque sabe que su compañero tiene la seguridad de un buen profesional con muchas horas de experiencia. Abajo, los otros rascacielos, ya pequeños, que se difuminan en la niebla de Nueva York.

Son dos de los 3400 trabajadores que trabajaron en la contrucción de este gigante. La mayoría eran emigrantes procedentes de Europa junto con cientos de trabajadores de Mohawk (expertos en hierro) muchos de ellos de la reserva de Kahnawake, cerca de Montreal. Según las cuentas oficiales, cinco trabajadores murieron durante la construcción.
El Edificio Empire State fue diseñado por Gregory Johnson y su empresa de arquitectura Shreve, Lamb y Harmon, que realizaron los dibujos del edificio en tan sólo dos semanas, utilizando como base sus anteriores diseños, como el edificio Reynolds en Winston-Salem, Carolina del Norte y la Torre de Carew Cincinnati, Ohio. El edificio fue diseñado de arriba a abajo. Los principales constructores fueron los Hermanos Starrett y Eken, y el proyecto fue financiado principalmente por John J. Raskob y Pierre S. du Pont. La empresa de construcción fue presidida por Alfred E. Smith, un ex gobernador de Nueva York. La excavación del sitio se inició el 22 de enero de 1930, y la construcción del propio edificio comenzó simbólicamente el 17 de marzo (día de San Patrick). Los nietos del gobernador Smith cortaron la cinta el 1 de mayo de 1931.
La construcción era parte de una intensa competencia en Nueva York por el título del edificio más alto del mundo. El edificio fue inaugurado oficialmente el 1 de mayo de 1931 en forma especial, el Presidente de los Estados Unidos del momento (Herbert Hoover) convertió el Edificio Empire State en el edificio de la luces, con sólo pulsar un botón desde Washington, DC.

Pero lo que yo me pregunto es qué medidas de seguridad utilizaría Lewis W. Hine, para tomar estas fotografías.
Yo no las hubiera hecho.

domingo, 19 de abril de 2009

NEUTRALIDAD.

La verdad es que muchas veces es difícil mantenerse neutral, no involucrarse.
Casi siempre nos obligan, o nos obligamos, a ser beligerantes en cualquier tema que se nos propone o con el que nos encontramos en nuestra vida.
Porque aunque nosotros no queramos tomar partido por una u otra opción, los implicados nos instan a que decidamos a cual de las propuestas apoyamos.
Ésto, en principio tiene su lógica, y se puede admitir que quieran conocer nuestro posicionamiento. El problema está en que, desde el momento que decidimos, nos convertimos en los enemigos de los que no hemos apoyado.
Uno puede ser del Real Madrid o del Atléti, pero también puede ser del Rayo Vallecano o, simplemente no gustarle el futbol; pero si presencias la disputa entre dos forofos de distintos equipos y se te ocurre corroborar los asertos de uno de ellos, indefectiblemente te convertirán en el enemigo del otro.

Suele pasar algo parecido cuando el tema es político. Puedes no pertenecer a ningún partido, incluso puedes haber votado a distintas formaciones en las elecciones, en función de los programas que cada partido haya presentado, pero en caso de controversia, serás el enemigo del simpatizante de un partido con el que no estés de acuerdo.
Y la cosa puede llegar a ser grave si no te desternillas cuando uno cuenta un “chiste” del lider del partido rival, aunque sea de muy mal gusto, como suele suceder normalmente.

Y es que ya se sabe: “El que no está conmigo está contra mí”.

Y es imposible convencer a tu interlocutor de que no; de que no estás contra él; que simplemente pasas del tema, que respetas lo que él quiera pensar, pero que no lo compartes.

Y el problema grave está en que hay muchos que no aceptan la neutralidad, que la comparan con la cobardía, el relativismo, la falta de ideales y el pasotismo. Hay muchos que te exigen la fe inquebrantable, la adehesión incondicional, la sumisión sin fisuras a sus dogmas y mandamientos, que comulgues con sus ruedas de molino, y si no lo haces, simplemente, eres su enemigo, porque como no estás con ellos, estás contra ellos.

Y lo primero que harán, será quererte convencer de que estás en un terrible y peligroso error. Lucharán por todos los medios para llevarte al buen camino, para salvarte. Pero si no lo consiguen, como eres su “enemigo”, tienen que combatirte, aunque tú no estés dispuesto a hacer nada contra ellos.

Y ¡ay de tí! si se te ocurre cuestionar sus principios, entonces no tendrán más remedio que aniquilarte, porque eres un peligro para la sociedad que ellos defienden.

Un amigo me pregunto, no hace mucho, quíen había dicho esa frase. Le dije que está en los evangelios de Mateo (Cap.12 v.30) y Lucas (Cap.11 v.30), pero añadí que tengo serias dudas de que realmente fueran pronunciadas por Jesús de Nazaret, aunque es, posiblemente, la enseñanza que más seguidores tiene.
Nota: Esta entrada está dedicada expresamente a un anónimo comunicante que me ha declarado su "enemigo" por no compartir sus mismas ideas y porque no le gusta lo que digo en el blog, aunque él lo lee, por lo que parece, todos los días. Él, desde luego, no es mi enemigo; simplemente lo ignoro. como él debería hacer conmigo si no le gusta lo que digo.