miércoles, 24 de junio de 2009

MONASTERIO SANTA MARIA DE HUERTA.

En mi nuevo peregrinar he llegado a un lugar de retiro y oración, donde otros eremitas se refugiaron buscando un lugar donde vivir. Un lugar privilegiado que merece la pena visitar.

EL MONASTERIO DE SANTA MARIA DE HUERTA.
El monasterio de Sta Mª de Huerta se asienta en la vega del Jalón, al sur de la provincia de Soria, haciendo frontera entre los antiguos reinos de Castilla y Aragón. Monasterio cisterciense del linaje de Morimond, surge cuando unos monjes del monasterio francés de Berdous se instalan hacia el año 1150 en la villa de Cántavos, término del actual pueblo de Fuentelmonge, a unos 15 km de Huerta. Aquí los monjes poseían una granja y decidieron establecerse en ella definitivamente hacia 1162, dadas sus mejores condiciones de vida.

Desde entonces el monasterio se fue construyendo y ampliando a lo largo del tiempo, residiendo siempre una comunidad de monjes hasta su expulsión en 1835 por la exclaustración y desamortización promovida por Mendizábal. Finalmente vuelven los monjes en 1930, esta vez desde monasterio cántabro de Viaceli.
Al visitar el monasterio nos encontramos dos etapas constructivas principalmente: los siglos XII y XIII y los siglos XVI y XVII. En la primera se construye la planta típicamente cisterciense alrededor del claustro gótico. A la segunda etapa pertenecen el claustro herreriano, el claustro plateresco -sobre el gótico- y el coro alto entre otros locales, manifestación del nuevo impulso que toma el monasterio en su andadura dentro de la Congregación de Castilla.
Lo primero que llama la atención es la limpieza y perfecta conservación de todas las instalaciones. Vamos a hacer un pequeño recorrido por el monasterio:
Claustro Gótico
Con toda su fuerza simbólica, en él confluyen las tres dimensiones humanas: cuerpo, alma y espíritu, junto con su vertiente social, aspectos reflejados en cada uno de sus lados y las dependencias que en ellos se encuentran. Su cuadratura recuerda a la Jerusalén celeste, también ella cuadrada, queriendo ver en la vida monástica una encarnación en la historia humana de la utopía escatológica. La piedra cuadrada -signo de Cristo- con la que se construye el claustro, moldeada de diversas formas, manifiesta la unidad y diversidad de sus miembros y el deseo del monje de vivir sin separar lo corporal y lo espiritual, lo terreno y lo celeste, lo interior y lo exterior, lo personal y lo social. Encima se construyó en el s. XVI otro claustro, éste plateresco, con una sensibilidad muy distinta a los orígenes.
Iglesia

Se encuentra en el lado sur. Conserva pinturas del siglo XVI y un espléndido retablo barroco del XVIII. En su entrada existe una verja, también de ese siglo, sobre la cual se halla el coro del siglo XVI, acompañado del órgano barroco.

Panda del capítulo

En la "panda" -o lado- oriental del claustro se debiera encontrar la sala capitular bajo el dormitorio de los monjes, pero sólo se conservan su entrada y los ventanales, al construirse en su lugar una amplia sacristía en el siglo XVII. A continuación encontramos la capilla De profundis, ocupando parte de lo que fue el scriptorium y lugar donde actualmente se proyecta un audiovisual multimedia que ayuda al visitante a comprender mejor la historia, el arte y la espiritualidad de Císter.

Refectorio de monjes
Comenzado a construirse en 1215 y con una interesante bóveda sexpartita, es único en su género. Empotrado en uno de sus muros se encuentra un púlpito con escalera para el lector.
Cocina gotica
Cocina cuadrada con una gran chimenea central y rodeada de ocho tramos de bóveda de crucería.

Refectorio de conversos

Es la pieza más antigua. Con gruesos muros, ventanas abocinadas y ménsulas empotradas terminadas en modillones. Los capiteles de las columnas centrales mantienen la tradición de sobriedad ornamental. Sobre este refectorio se hallaba el dormitorio de los hermanos, hoy convertido en la biblioteca del cenobio.

Cilla o bodega

Se encuentra también en la zona de los conversos. Destacan en ella sus cinco arcos diafragmas y un alfarje o artesonado de madera. Es donde se almacenaban los productos agrícolas del monasterio

Claustro Herreriano

Levantado en el s. XVII, es la zona que habitan actualmente los monjes.

Un lugar que me atrevo a recomendar su visita.
Nota: La información está elaborada con datos de la página web del Monasterio. Todas las fotografías son originales, tomadas en mi visita a Santa María de Huerta.