sábado, 2 de junio de 2012

LA COLEGIATA DE SAN MIGUEL DE AGUILAR DE CAMPOO.



En la Colegiata confluyen los estilos tardorrománico, gótico, renacentista y barroco herreriano. La portada occidental es un sobrio ejemplo del románico de transición: desprovista de escultura historiada, la puerta se abre abocinada bajo un juego de nueve arquivolta\arquivoltas cuya curva apuntada se hace más acusada desde fuera hacia dentro. Las arquivoltas descansan en 18 capiteles con decoración vegetal simple (hojas de acanto) y 16 baquetones. Sólo la arquivolta más interior, la que da cornisa a la puerta y presenta un perfil completamente ojival, está sencillamente decorada a base de entrelazados.




El ábside principal es un volumen pentagonal de tres cuerpos bien definidos por sus cinco paños, sus cinco dobles juegos de ventanales ojivales y sus cuatro contrafuertes recorridos por dos líneas de arimez, lo que le proporciona un aspecto macizo y robusto, y a la vez que airoso. De otros vanos de luz, cabe destacar, por su tracería, el gran rosetón del brazo meridional del crucero y uno triangular de lados curvos abierto en la fachada occidental.




La mitad superior de la torre es un doble cuerpo cuadrado montado a principios del siglo XVII, con arreglo al austero estilo herreriano. Luce los escudos de los Marqueses de Aguilar, Juan Fernández Manrique de Lara y su esposa Blanca de Pimentel, y está rematado por una cúpula hemisférica. En la mitad inferior, más antigua, puede divisarse un pequeño relieve semicircular románico empotrado en la pared, que muestra a Cristo en majestad flanqueado por ángeles; es muy probable que en sus orígenes cerrara el tímpano de la puerta situada más abajo.




El interior es de tres naves cubiertas con bóvedas de crucería, simples en las naves laterales y sexpartitas en la principal, más crucero o transepto. El retablo mayor es una obra renacentista ejecutada entre 1555 y 1565; en la calle central, separados de los demás motivos por pares de columnas jónicas, se alzan el patrón titular, el Arcángel Miguel, y la Virgen en Asunción. De la misma época es la sillería del coro.




En la nave de la Epístola, la Capilla del Arcipreste de Fresno, también conocida como Capilla de los Pobres, conserva varias piezas de interés artístico. En la misma nave, la Capilla del Santo Cristo contiene, en una urna de cristal, la venerada y milagrera imagen yacente del Cristo de Aguilar, históricamente ligado al cercano Monasterio de Santa María la Real.




Es característica del monumento la serie de sepulcros de los siglos XIV al XVI, varios de ellos dispuestos en las paredes perimetrales de las naves laterales, formando galería, en arcosolio y decorados con bellos trasdoses góticos de traza flamígera. Entre ellos, destacan: el del Arcipreste García González, gótico, emplazado en la Capilla del Arcipreste de Fresno y con estatua yacente; el del Canónigo Pablo González; y el de los Marqueses de Aguilar, situado en el presbiterio y labrado a base de mármoles y jaspes, con bultos orantes tallados en un realista estilo proto-barroco. El patrimonio mobiliario lo integran las colecciones de crucifijos y tallas góticas, que pueden contemplarse en el museo parroquial.




Y con este reportaje, termino la serie dedicada al románico por tierras palentinas, cántabras y burgalesas.

viernes, 1 de junio de 2012

jueves, 31 de mayo de 2012

UNA PHOTINIA HA REEMPLAZADO AL CIPRES.


La Fotinia o Photinia, tiene hojas alternas, ligeramente dentadas, alargadas y brillantes, los brotes jóvenes en primavera son rojizos. Florece a mediados de primavera y  sus pequeñas flores son de color blanco.
Y una photinia, ésta, ha sustitudio al ciprés en el patio de mi casa.



Ya aprovecho para enseñaros mis nuevas plantas, un rododendro, unas petunias y un madroño, que han sustituido a las anteriores, que ya estaban algo marchitas.


Y este es el nuevo aspecto de mi patio.


miércoles, 30 de mayo de 2012

TEATRO EN CHINCHON



Escrita por Joaquin Abati y Federico Reparaz.



Joaquín Abati y Díaz (Madrid29 de junio de 1865 - Madrid, 30 de julio de 1936). Escritor y libretista de zarzuelas, nacido en Madrid en 1865.
De padre italiano y madre española, estudió Derecho y, una vez licenciado, aunque nunca ejerció, publicó un libro titulado Respuestas a los Temas de Derecho Administrativo, con la finalidad de ayudar a quienes se presentaban a unas oposiciones, dándose la curiosa circunstancia de que él nunca consiguió superar ninguna, y sí en cambio, muchos de los que habían usado su libro. Por este motivo decidió abandonar la abogacía y dedicarse a la literatura, que le atraía mucho más.
Su primera obra teatral fue el juguete cómico Entre doctores, estrenado en el Teatro Lara en 1892, al que siguieron desde simples monólogos de carácter humorístico, como El Conde Sisebuto y Las cien doncellas, hasta piezas de tres y más actos, algunas en colaboración con Carlos Arniches.
Autor de fecunda producción, obtuvo éxitos clamorosos y de su pluma surgieron más de 120 títulos, que hicieron considerarle como un autor de primera fila en su época. De sus obras podemos destacar principalmente El debut de la chicaLa conquista de MéxicoDoña Juanita (escrita en colaboración con Francisco Flores García), Genio y figura (1910), No te ofendas, Beatriz (1920) (ambas con Carlos Arniches), España nuevaEl Conde de Lavapiés y La Viuda alegre.
Destacó en su faceta de autor de zarzuelas, campo en el que colaboró con otros autores, como Carlos Arniches y Antonio Paso.
Varias de sus obras teatrales fueron destinadas a libretos de zarzuelas, como Los amarillos, pieza en un acto; La corte de Risalia, en dos actos; La mujer artificialLa mulata y su obra más conocida, El asombro de Damasco, que escribió en colaboración con Antonio Paso Cano y a la que puso música el maestro Pablo Luna, quien la estrenó en 1916.
Volvió a entrar en contacto con su carrera de Derecho y llegó a ser académico de la Real de Jurisprudencia y Legislación.
Joaquín Abatí, falleció en Madrid, el año 1936.
Sobre Joaquin Abati y su "Conde Sisebuto" ya escribí en este mismo blog: 


Por su parte, el otro coautor, Federico Reparaz y Chamorro ingresó en Telégrafos en 1895, con el número uno de su promoción; en 1897 ingresó, también, en la Secretaría del Senado como oficial, y simultaneó ambas ocupaciones con la publicación de obras teatrales, muchas de  ellas adaptaciones de obras extranjeras que traducía y adaptaba. 
Su producción desde 1901, fecha del estreno de su primera obra, hasta su muerte en 1924, estrenó por lo menos una obra anual. Sus obras mas celebradas fueron:  “El cinematógrafo”, juguete cómico en dos actos 
estrenado en la temprana fecha cinematográfica de 1905,  “La Princesa de los Balkanes”, comedia lírica en tres actos,   “El cardenal”, comedia escrita en colaboración con Linares Rivas,  “La Pimpinela escarlata”, adaptación de la novela la Baronesa de Orcy ; escenificada en cuatro actos, en colaboración con Juan Ignacio Luca de Tena, “El director es un hacha”, comedia escrita en colaboración con López Montenegro y “Teodoro y Compañía”, zarzuela que escribió poco antes de su muerte. Y por supuesto, es el autor junto con Joaquín Abati de la obra "Los Hijos Artificiales" que se va a representar en el teatro "Lope de Vega de Chinchón".
Reparaz fue encargado de la Biblioteca de Telégrafos los últimos años de su vida.


Una buena oportunidad para pasar un rato agradable y colaborar con la Pasión de Chinchón.
Puedes elegir el día que mejor te venga.

martes, 29 de mayo de 2012

LOS MONUMENTOS DE AGUILAR DE CAMPOO.



La villa de Aguilar de Campoo posee un importante patrimonio artístico y cultural en el que destacan muy notables edificaciones de carácter religioso, civil y militar de estilos románico, gótico y renacentista, así como las razonablemente bien conservadas ruinas de elementos defensivos y militares. Entre ellos destacan:



Monasterio de Santa María la Real: Antiguo cenobio de la orden Premonstratense que acoge la sede de la Fundación homónima, el Centro de Estudios del Románico y el Museo del Territorio y del Románico.
El Monasterio de Santa María la Real es monumento construido a caballo entre los siglos XII y XIII en un estilo de transición del románico al gótico con elementos del arte cisterciense, en la actualidad acoge las sedes de la Fundación Santa María la Real-Centro de Estudios del Románico y del Museo ROM: Románico y Territorio. Es Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de Monumento Histórico-Artístico Nacional.
Entre 1955 y 1968 la Dirección General de Bellas Artes acometió una primera campaña de restauraciones que afectaron a las cubiertas de la iglesia, al claustro y la sala capitular, que se hallaban medio hundidos y llenos de escombros. Ambos espacios fueron reconstruidos casi por completo, llegando a desmontarse y volverse a armar partes enteras. En 1978 comenzó una segunda etapa de desescombro y restauración a iniciativa de la Asociación de Amigos del Monasterio de Aguilar, creada aquel año, la cual aplicó, a diferencia del historicismo que había caracterizado la restauración anterior, un criterio didáctico, arqueológico y eminentemente funcional, ya que se pretendía tanto reconstruir como rehabilitar para dar espacio a nuevos usos seculares.




Las dependencias recién restauradas acogieron a partir de 1984 un Instituto de Enseñanza Secundaria, función educativa destinada a los jóvenes del pueblo y de la comarca. Siempre bajo el impulso voluntario de su Asociación de Amigos, el Monasterio multiplicó su oferta de actos culturales y académicos. En 1985 comenzó a funcionar la Escuela Taller, dirigida a completar la labor restauradora del edificio y a dar formación arquitectónica y arqueológica.
1988 es un año decisivo con la inauguración del Centro de Estudios del Románico (CER) como culminación de una década de esfuerzos de la Asociación de Amigos del Monasterio de Aguilar. Entre sus fundadores figuraba el arquitecto y humorista gráfico lebaniego José María Pérez González, alias Peridis.




Además, en Aguilar de Campoo se pueden admirar los siguientes monumentos:
Monasterio de Santa Clara:
Plaza Mayor: además de la Colegiata, se encuentran varios palacios, entre ellos el de los Marqueses de Aguilar (de estilo barroco), el de los Fontaneda, casonas de estilo señorial cántabro (con amplias galerías mirando hacia el sur), la casa de los Siete Linajes, etc.
Palacio de los Marqueses de Aguilar de Campoo (del que se conserva una de sus alas)
Iglesia de Santa Cecilia:
Iglesia de Santa Clara:



Castillo medieval:

La villa de Aguilar de Campoo fue declarada Conjunto Histórico-Artístico el 20 de enero del año 1966.


lunes, 28 de mayo de 2012

EL AMO. CAPITULO XIII


La vida de Rosa se había vuelto monótona. El Amo distanciaba las visitas que solían coincidir con los altercados que tenía con su mujer, cuando hacía algo impropio y se propasaba con alguna de las criadas. La niña ocupaba la mayoría de su tiempo y desde que faltó el tío Bigote, no tenía más noticias de Recondo que cuando recibía alguna esporádica visita de su padre, cuando venía a la capital para traer un carro de melones o acompañando a los arrieros que le contrataban como ayuda para traer vino a las tabernas de Madrid.
Si el vino de Recondo era apreciado, mucho más lo era su aguardiente anisado, que hasta había obtenido algún premio internacional a su calidad. Junto con el vino todos los arrieros traían unas garrafas de arroba del preciado licor que cada vez era más solicitado como reconstituyente y como un buen digestivo para después de las comidas.
Esta fama ya venía de lejos, cuando los cosecheros de vino, al no vender toda la producción anual, y no conocerse aún los métodos de conservación del vino que descubrirían años después los vinateros franceses, no tenía más remedio que utilizar los excedentes para quemarlo en alambiques y así filtrado lograr el aguardiente, que mezclado con un jarabe de anís o matalahúga se convertía en el licor que había dado fama a Recondo.
Uno de estos viajes de su padre coincidió con la boda del Rey don Alfonso XIII con la princesa Victoria Eugenia de Battembrerg. Toda la Capital estaba engalanada y se habían organizado grandes fiestas para celebrar el acontecimiento. El padre de Rosa tuvo que permanecer dos días en Madrid y se quedó a dormir en casa de su hija. Era el día 31 de Mayo de 1906, se había decretado fiesta en la capital y todos los comercios estaban cerrados. Los colegios habían dado vacaciones para que los niños también pudiesen participar en la alegría por la boda del Rey de España.
Amaneció una mañana soleada y agradable. Rosa aprovecho que su padre podía quedarse con la niña para salir temprano acompañando a Julia y a la señora Susana para ver de cerca la comitiva.
Como la catedral de la Almudena estaba en obras, la ceremonia nupcial se celebró en la Iglesia de San Jerónimo el Real. Después la comitiva partiría con destino al Palacio Real, donde se celebraría una gran recepción para todos los invitados que habían llegado de las principales Monarquías Europeas.
Los recién casados en una carroza tirada por seis caballos blancos, saludaban al pueblo de Madrid que ocupaba las aceras de todas las calles del recorrido.
Rosa y sus vecinas habían cogido sitio a la entrada de la calle Mayor, junto a la Puerta del Sol. Habían tomado un chocolate con churros y esperaron más de hora y media, hasta que vieron aparecer el cortejo por la calle de Alcalá. Cuando la carroza de los reyes pasó a su lado pudieron constatar que no era exagerado el apelativo de la “Princesa más bella de Europa” con el que se aludía a la ya Reina doña Victoria Eugenia. Los balcones llenos a rebosar lucían banderas de España, mantones de Manila o simples colchas, y sus ocupantes no paraban de arrojar ramos de flores cuando llegaba hasta ellos la carroza real.
La comitiva estaba formada por una multitud de carrozas que iban escoltadas por la guardia real a caballo. Además se habían tomado todas las precauciones para evitar cualquier contratiempo, colocando a muchos policías de uniforme y de paisano por todo el recorrido, porque había sospechas de algún intento de alteración del orden público por los grupos anarquistas, que habían estado más activos que de costumbre durante las últimas semanas.
La comitiva se movía muy despacio y cuando terminada de pasar toda la escolta, muchos de los espectadores continuaban detrás de la comitiva intentando llegar hasta el Palacio Real, aunque era difícil avanzar por la calle Mayor.
Al llegar la carroza real a la altura del número 88, se detuvo un momento porque algo asustó a uno de los caballos. Desde los balcones que en ese punto estaban más cerca de la comitiva porque la calle se estrechaba, no paraban de caer flores, como en todo el recorrido.
De uno de ellos salió en ramo de flores, que cayó cerca de la carroza. Un gran estallido atronó el mediodía madrileño. Fueron minutos de confusión y el pánico cundió entre los espectadores que estaban cerca. La guardia real rodeó la carroza real, que escoltada por el grueso de la escolta enfiló el último tramo de la calle Mayor, para torcer por la calle de Bailén y refugiarse en el cercano Palacio Real. El resto de las carrozas quedaron bloqueadas por la multitud y la policía se veía sobrepasada por los acontecimientos, intentando mantener a salvo a tan ilustres acompañantes.
Los policías que estaban apostados en las cercanías, enseguida localizaron la casa de donde había salido el ramo asesino. Tirados en las aceras y en medio de la calle, había personas mutiladas por la metralla de la bomba. Decenas de muertos y muchos más heridos eran atendidos por los que habían salido indemnes de la explosión, en espera de la llegada del personal sanitario que se había previsto para el caso de cualquier emergencia.
A sólo unos metros más arriba de la calle Mayor, Rosa y sus acompañantes se veían arrastradas por el tumulto de gentes que empujaban en las dos direcciones; unos hacía la Puerta del Sol, para intentar huir de donde había sonado el estruendo y otros empujando hacía el Palacio Real para enterarse de lo que había ocurrido. Como pudieron llegaron al ensanchamiento de la Puerta del Sol, donde ya se podía andar con una cierta facilidad. Nadie sabía decir lo que realmente había pasado.
Alguien que había subido hasta Sol, adelantando por la calle Arenal, fue el primero que dijo algo de un atentado. Pocos minutos después otro decía que habían matado a la reina; poco después se confirmaba que la carroza de los reyes había llegado a Palacio sin ningún daño. Se hablaba de muchos muertos y muchos heridos.
-¡Han detenido al asesino! Gritó una mujer que subía por la calle Mayor y que parecía estar bien informada, por los detalles que daba.
La policía invitaba a todos a desalojar la plaza y las calles de alrededor y ordenaba que cada uno se marchase a casa. Las tres mujeres muy asustadas se encaminaron a la Plaza de Santo Domingo para bajar a toda prisa por la calle de Leganitos.
Tenían que ir dando las noticias que conocían a los que se cruzaban con ellas y que estaban ansiosos de conocer lo que había pasado.
El tío Indalecio respiró tranquilo cuando vio, desde el balcón, aparecer a su hija y a las vecinas por la calle abajo. Había pasado casi una hora desde que se oyó el estruendo y empezaron a correr rumores de lo que podía hacer ocurrido.


Al día siguiente ya todo Madrid conocía el nombre de Mateo Morral, un anarquista que había intentado matar a los reyes y que cuando era conducido a la cárcel después de ser detenido, se había suicidado para librarse del juicio y del garrote vil al que sin ningún género de dudas habría sido condenado.



Cuando el tío Indalecio llegó a Recondo tuvo que contar miles de veces todo lo que había visto y oído el día en que fue testigo casi directo del intento de asesinato de los reyes de España, el mismo día de su boda; no escatimando ninguna clase de detalles, la mayoría de ellos escuchados a sus hija y alguno de ellos inventados, pero que daban una mayor verosimilitud al relato de los hechos. Durante unos días el pobre tío Indalecio, que hasta entonces no había pasado desapercibido en el pueblo, fue la referencia obligada para todos los que querían saber lo ocurrido.
- A mí me lo ha contado el Indalecio que estuvo en Madrid ese día. Aquello debió ser horroroso…  más de ochenta muertos, y no sé cuantos heridos…
Indalecio Buitrago tuvo, así,  su momento de gloria, del que se acordaría el resto de su vida.  

domingo, 27 de mayo de 2012

RESTAURACIÓN DE LA IGLESIA DE CHINCHÓN DESPUÉS DE LA GUERRA CIVIL.


En diversas ocasiones he hablado de la Iglesia Parroquial de Chinchón y de las diversas ocasiones en las que se han realizado obras de restauración. 
Entre los muchos papeles que he ido guardando, encontré este recordatorio con la fecha en que se inauguró la Iglesia Parroquial después de las obras de restauración que se realizaron con motivo de los desperfectos que se ocasionaron durante la Guerra Civil.
Como se ve en el recordatorio, tuvo lugar el día 8 de diciembre de 1945, después de más de cinco años de trabajos. Durante este tiempo los actos de culto se desarrollaron en la Iglesia del Rosario.